La diputada Elisa
Carrió (Coalición Cívica-ARI) presentó ayer una impugnación contra la
nominación de Alejandra Gils Carbó para la Procuración General
por realizar interpretaciones que podrían “estar reñidas con valores
democráticos” . Argumentó además que la candidata dictaminó en sus resoluciones
como fiscal en el fuero comercial para asegurar “el lucro de las entidades
bancarias” y trató de imponer un “criterio financiero por sobre la Ley y los derechos
constitucionales”.
“(Gils Carbó) se
atribuye la representación del interés general pero termina por pronunciarse a
favor de un determinado sector o parte de los expedientes”, opinó Carrió. Gils
Carbó es la candidata que presentó el Gobierno luego del retiro de la polémica
candidatura del titular de la
SIGEN , Daniel Reposo.
Los trámites de la
candidata a procuradora se hallan en la etapa de los 15 días contemplados para
la presentación de adhesiones o impugnaciones a la postulación, tras lo cual
pasará al Senado donde se hará una audiencia pública y después su pliego será
debatido en el recinto de esa misma cámara.
Carrió hizo alusión a
una interpretación realizada por Gils Carbó en el que “se encuentra permitido
el anatocismo , que entiendo podría estar reñida con valores democráticos en
tanto se contrapone con la defensa de la ley vigente y de los derechos
constitucionales”. Puntualizó que “el anatocismo es el acto de cobrar intereses
sobre los intereses vencidos y no pagados por haber incurrido el deudor en
mora, esos intereses comienzan a sumarse al capital que debe”.
Agregó que “la
situación permite que se puedan cobrar intereses sobre el capital que se debe y
sobre los intereses aún no pagados, generando una deuda cada vez mayor que
puede -en poco tiempo- convertir el monto en varias veces el de la deuda
original.
Luego alude a “las
conductas cuestionables” de la candidata en el que cita “un caso de demora
injustificada en dictaminar” en el trámite de los autos “Comisión Nacional de
Valores c/Papel Prensa SACIF”.
Señaló además “ha
protagonizado sucesos que se encuentran lejos del decoro y la ética con la que
debe ejercer su digno cargo en el marco de una situación de alto conflicto con
la referida Cámara Comercial. La que ella misma define como una “ruptura
institucional”.
Clarín, 16-6-12