Homilía de monseñor Jorge Eduardo Lozano, obispo de
Gualeguaychú y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social(7 de
septiembre de 2014)
Aica, 9-9-14
Desde que somos
chicos nos enseñan a ser agradecidos. Cuando nos dan un regalo, nos prestan una
lapicera, nos ayudan en la tarea y un sinnúmero de oportunidades, hemos de dar
la respuesta adecuada.
Ser agradecido
significa reconocer que alguien hizo algo bueno por nosotros. Se puede expresar
verbalmente, con la mirada, una sonrisa, un abrazo. Algunos gestos son producto
de la cortesía momentánea: dar el asiento con el colectivo, ayudar a cruzar la
calle, ceder el paso, etc. Otros implican respuesta a un esfuerzo más
sostenido: atender un enfermo, cuidar a los más débiles...
El dar las gracias de
corazón y a fondo nos brota espontáneamente cuando experimentamos ser amados, o
nos sentimos plenificados por la alegría. Y damos gracias a la vida, a Dios. Él
nos ama de verdad y cuida de cada uno.
En estos días se
divulga por radio, TV, periódicos, redes sociales una campaña cuyo lema es
“Gracias por tu ayuda”. ¡Qué bueno escuchar esto en labios de alguien que se
siente abandonado y desplazado! En la parábola del Evangelio, Jesús enseña con
claridad que está presente en los pobres, los enfermos, los hambrientos, los
sin techo, los presos... “Les aseguro que cada vez que lo hicieron con el más
pequeño de mis hermanos, lo hicieron conmigo.” (Mt 25, 40)
Para vivir esta
enseñanza hace falta parar un poco, mirar alrededor y potenciar dos actitudes:
darnos cuenta y hacernos cargo.
Lo primero es aceptar
lo que sucede y no ocultar a los pobres. Hay muchos lugares del país donde los
niños son desnutridos: una de las pobrezas más hondas y dolorosas, y que
generan daños irreversibles. Ante estas situaciones debemos ser solidarios y
promover una sociedad más justa. Hace poco el Dr. Abel Albino, que tanto lucha
contra la desnutrición infantil, decía: “Lo que nos falta no es comida, lo que
nos falta es vergüenza”. Realmente deberíamos sentirnos humillados como
sociedad ante la inequidad y el hambre.
Pero si no nos
hacemos cargo de la patria, poco o nada va a cambiar. Con la queja sola no se
construye. Francisco varias veces denuncia la globalización de la indiferencia.
Hacernos cargo implica pisar el barro, poner manos a la obra.
“Gracias por tu
ayuda” es el lema de la
Colecta Nacional Más X Menos que se realizará en todas las
Iglesias y Capillas el próximo sábado 13 y domingo 14 de septiembre. Con lo recaudado
se sostienen diversos proyectos de evangelización y promoción humana en las
zonas más pobres del país. Tal vez te dieron un sobre para tu colaboración
económica. Hay otras formas de donar que las encontrarás en
www.colectamaspormenos.com.ar
Vos sos importante
para muchos. Te necesitamos. Gracias por tu ayuda.
Mañana, 8 de
setiembre es la fiesta del nacimiento de la Virgen María , justo 9
meses después del 8 de diciembre. En la Argentina también se realiza la jornada de la
vida religiosa. Recordamos especialmente a varones y mujeres que se consagran a
Dios para el servicio a los hermanos en diversos carismas, la educación, los
enfermos, los pobres, la misión, la contemplación... La vida de estos hermanos
y hermanas son un signo profético del amor de Dios, generosidad y entrega,
servicio y pobreza. Demos gracias al Maestro que llama, y recemos para que haya
más corazones abiertos a las vocaciones de especial consagración.
Esta semana estaremos
de Retiro espiritual con varios sacerdotes de la diócesis de Gualeguaychú.
Acompañanos con tu
oración.
Monseñor Jorge
Eduardo Lozano, obispo de Gualeguaychú