Se casaron 7171 parejas del mismo sexo
Por
Verónica Dema
La
ley se aprobó el 15 de julio de 2010; sólo en la Ciudad de Buenos Aires se
realizaron 1834 bodas; los avances en materia de diversidad sexual y las
asignaturas pendientes
Marilina
Ross y su novia Patricia anunciaron su boda pocos días antes de cumplirse tres
años de vigencia de la ley de matrimonio igualitario en la Argentina. En este
tiempo, 7171 parejas del mismo sexo, algunas con convivencias de diez años,
decidieron casarse. Hasta fin del año pasado, la cifra se ubicaba en 5839. Son
cifras oficiales de la
Federación Argentina Lgbt.
A
tres años de la aprobación de la ley de matrimonio igualitario, que convirtió a
la Argentina
en el primer país en América latina y décimo en el mundo en consagrar la
igualdad, además de brindar la posibilidad del matrimonio, se avanzó en el
reconocimiento igualitario de hijas e hijos de parejas no casadas y en la
gestación por sustitución y fertilización asistida sin discriminación. También
se habilitó el matrimonio igualitario para turistas, por medio del cual más de
100 parejas extranjeras pudieron casarse.
En todas
las provincias de la
Argentina se realizaron enlaces a partir de la ley. La Ciudad de Buenos Aires, con
1834 bodas, lidera el ránking; le siguen las provincias de Santa Fe, Córdoba y
Mendoza, proporcionalmente las que más matrimonios registraron en relación con
la cantidad de habitantes.
En
el tercer aniversario del matrimonio igualitario, Martín Canevaro, presidente
de 100% Diversidad y Derechos expresó: "Festejamos las miles de uniones de
parejas del mismo sexo en todo el país y la inscripción de cientos de niños y
niñas con sus dos madres legalmente reconocidas. La legislación igualitaria
lejos de disolver la familia, como vaticinó el actual papa Francisco, ha
legitimado social y jurídicamente a miles de familias que hoy cuentan con los
mismos derechos, sin afectar ningún derecho de las demás".
Esteban
Paulón, presidente de Federación argentina Lgbt, expresó: "Estamos muy
felices y con festejos en todo el país por estos tres años de igualdad que
demuestran que los países que abrazan el matrimonio igualitario son países
mejores".
Recordó:
"Nuestra sociedad ha avanzado enormemente desde aquella madrugada del 14 y
15 de julio y entre esos avances debemos destacar la ley de identidad de género
y el cambio en la mirada social hacia la diversidad sexual. Es cierto que falta
mucho por hacer pero el apoyo social inmenso existente nos da fuerzas para
lograr todo lo que falta, siempre desde una construcción plural y en la
diversidad."
Pedro
Paradiso Sottile, secretario y coordinador del Área Jurídica de la CHA manifestó: "Estamos
orgullosas/os de que la
Argentina haya sido el primer país de América Latina y el
Caribe en aprobar el Matrimonio Igualitario, que sea el primero también en
incluir a las parejas extranjeras en el ejercicio de un derecho constitucional
y humano y que nuestra comunidad ejerza este derecho. Celebramos estos matrimonios
que son actos que como desde la
CHA llevamos adelante desde hace más de 29 años, porque le
pusimos el cuerpo, el nombre y el trabajo a la lucha por nuestros
derechos".
La
promulgación de la ley de matrimonio igualitario es una tendencia mundial. Hace
tres años, la Argentina
se convirtió en el décimo país en el mundo en reconocer el derecho a contraer
matrimonio civil a las parejas del mismo sexo y el primero en el continente
americano.
Ahora
la lista asciende a 14 países, además de Argentina, cuentan con matrimonio
igualitario Holanda, Bélgica, España, Canadá, Portugal, Sudáfrica, Noruega,
Suecia, Islandia, Francia, Reino Unido, Nueva Zelandia y Uruguay. Además por
vía judicial se reconoce el matrimonio entre personas del mismo sexo en Brasil
y varios estados de los Estados Unidos.
México,
Estados Unidos, Australia, Viernam y Colombia entre otros se encuentran en
pleno debate para habilitar este derecho.
El
avance más reciente lo constituyó la sentencia de la Corte Suprema de
justicia de Estados Unidos que derogó la ley de Doma y restituyó el derecho al
Matrimonio en el Estado de California. "Se estima que cerca del 10% de la
población mundial vive en países y regiones con matrimonio igualitario",
apuntó Paulón, de la
Federación.
LAS
MATERIAS PENDIENTES
Entre
lo pendiente, desde 100% Diversidad y Derechos, señalan la urgente necesidad de
avanzar en la reforma integral del Código Civil y Comercial unificado - que
actualmente se encuentra en consideración del parlamento - para incorporar el
ideario igualitario en la legislación de fondo, especialmente en el derecho de
familia.
El
proyecto en análisis, amplía y protege los derechos de la diversidad familiar.
El Capítulo de Filiación reconoce la "voluntad procreacional" como
fuente de filiación cuando se utilicen técnicas de reproducción asistida, la
cual se agregará a las fuentes de filiación ya reconocidas por naturaleza y
adopción, sin considerar el estado civil de sus madres o padres.
Canevaro
expresó que la aprobación de la reforma integral del Código Civil será un
cambio fundamental en el reconocimiento de la igualdad de los diferentes tipos
de familias "ya que todos los vínculos filiatorios quedaran plasmados en
la legislación de fondo; esto permitirá que los hijos e hijas de familias
co-maternales sean reconocidos legalmente por sus dos madres sin la necesidad
de estar casadas".
El
proyecto, también, crea la figura de "gestación por sustitución", que
posibilitará la construcción y el resguardo de los proyectos familiares de las
personas que no pueden procrear por gestación biológica o técnicas de
reproducción asistida. Además de otras importantes reformas legales en relación
a la adopción, el divorcio abreviado y los contratos prematrimoniales.
Por
su parte, desde la CHA
trabajan en lo que consideran otra materia pendiente, la modificación de la Ley contra la Discriminación para
que incluya la orientación sexual y la identidad de género. "También
esperamos que el Senado apruebe el proyecto de modificar la Ley de sangre para que no siga
excluyéndonos de la donación", dijo Cigliutti. Hace unos días se aprobó la
modificación para la Ciudad
de Buenos Aires.
Con
todo, las nuevas generaciones empiezan a crecer en el respeto a la diversidad,
sin prejuicios, sin miedos, sin estigmas y con libertad para amar. La Argentina ya no condena
más a nadie a vivir en el clóset. Ahí radica la felicidad y la dignidad de
millones de personas.