La Argentina mantuvo
su puesto en el ranking de desarrollo humano, según el índice elaborado por el
Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), presentado ayer en
esta ciudad. El país ocupa el lugar 49 entre 187 territorios evaluados en tres
dimensiones básicas: expectativa de vida, acceso a la educación y nivel de vida
digno. En América latina es superado por Chile y Cuba, que ocupan los puestos
41 y 44, y está por encima de Uruguay (50), Venezuela (67) y Brasil (79).
Según el PNUD, el
valor del índice de desarrollo humano (IDH) para la Argentina en 2014 fue
0,811, lo que la ubicó dentro del grupo de países de "muy alto"
desarrollo, integrado por 49 territorios. Sin embargo, cuando ese valor se
ajusta por desigualdad en acceso al desarrollo, el índice cae
significativamente, algo que también afecta a los demás países
latinoamericanos.
El IDH está
comprendido en un rango entre 0 y 1; cuanto más se aproxima a 1, mayor es el
nivel de desarrollo humano. Según ese índice, la Argentina sostiene su
crecimiento. Entre 1980 y 2013, el guarismo pasó de 0,665 a 0,801. En ese mismo
lapso, la esperanza de vida al nacer aumentó 6,8 años; creció 3,1 años la media
de años de escolaridad, y los años esperados de escolaridad aumentaron en 5,1
años. El ingreso bruto per cápita aumentó 47,4% entre 1980 y 2013.
Además del IDH, el
PNUD presentó ayer otros índices de progreso económico y social, como el nuevo
índice de desarrollo humano relativo al género (IDHG), que mide la desigualdad
entre hombres y mujeres en las tres dimensiones básicas: salud, educación e
ingreso. En este aspecto, la Argentina fue uno de los 16 países (sobre un total
de 148) donde "los valores del IDH para las mujeres son iguales o superiores
a los de los hombres". Según el PNUD, "en la Argentina las mujeres
tienen una mayor esperanza de vida y un mayor nivel educativo que los varones,
pero un ingreso per cápita sustancialmente menor".
En el IDH de este
año, los cinco primeros países en desarrollo humano fueron Noruega, Australia,
Suiza, Holanda y los Estados Unidos, y los peores, Sierra Leona, Chad,
República Centroafricana, Congo y Nigeria. No hubo cambio en los extremos de la
lista. Las naciones latinoamericanas con peor puntuación son Nicaragua (132),
Honduras (129) y Guatemala (125). Zimbabwe experimentó la mayor mejora en el
valor del índice, debido a un aumento importante de la esperanza de vida de su
población: 1,8 años de 2012 a 2013, casi cuatro veces más que el aumento promedio
mundial.
Las mejoras en
esperanza de vida, educación e ingresos pierden velocidad debido a desastres
naturales, políticas gubernamentales erróneas y el aumento de la desigualdad,
en un mundo donde las 85 personas más ricas tienen tanta riqueza como los 3500
millones de personas más pobres, sostiene el informe de la ONU La violencia es
otro de los factores que contribuyen a la pobreza, especialmente en América.
Más de 2200 millones
de personas en el mundo son pobres o están al borde de la pobreza, una cifra
que podría aumentar con las crisis financieras y las catástrofes naturales,
según surge del informe anual, que esta edición llevó por título "Sostener
el desarrollo humano: reducir vulnerabilidades y construir resiliencia
[capacidad de superar situaciones adversas]". El relevamiento determinó
que 1200 millones de personas en el mundo viven con 1,25 dólares o menos por
día y casi 1500 millones de personas de 91 países en desarrollo están al borde
de la pobreza.
Aproximadamente 1500
millones de personas sufren "pobreza multidimensional" en 91 países
en vías de desarrollo, es decir, padecen privaciones en las áreas de sanidad,
educación y "estándares básicos de vida", según el documento
difundido en Tokio por la responsable de ese programa, Helen Clark, y el primer
ministro japonés, Shinzo Abe.
Entre las personas
afectadas por la pobreza, 842 millones padecen hambruna crónica, un 12% de la
población mundial. Otros 800 millones de personas -el 15% de la población
mundial- se encuentran "en riesgo de pobreza", según los datos del
informe, que no obstante destaca los "recientes progresos logrados en la
reducción de la pobreza a nivel global".
"En algunos
países de América latina y el Caribe, a pesar de los grandes logros en
desarrollo humano, muchas personas se sienten amenazadas por los índices cada
vez más altos de homicidios y otros crímenes violentos", indicó la ONU.
El informe anual del
PNUD recuerda que aunque la pobreza sigue disminuyendo en el mundo, las
"vulnerabilidades" como los conflictos, los precios de los alimentos
o el cambio climático son persistentes y amenazan el desarrollo humano.
Según la ONU, dar
prestaciones sociales básicas a las personas pobres costaría un poco menos del
2% del PBI mundial, pero recordó que erradicar la pobreza extrema "no sólo
consiste en reducir sus niveles a cero, sino en asegurarse también de mantener
estos logros".
La Nación, 25-7-14