En junio el Parlamento de Alemania rechazó
la aprobación de un proyecto de ley que establecía el "matrimonio
homosexual".
En agosto, el de Gran Bretaña resolvió lo
mismo. Y el Primer Ministro Cameron declaró que era suficiente con la regulación existente de la
"unión civil".
Por último, el 20 de septiembre pasado, el
de Australia por 98 votos contra 42 adoptó
idéntica decisión.