DON BOSCO

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"BUENOS CRISTIANOS Y HONRADOS CIUDADANOS"

Obama impone la subversión del orden natural

Por P. Juan C. Sanahuja En su reciente visita a Brasil (19 y 20 de marzo), el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, durante el transcurso de sus conversaciones sobre Democracia, Derechos Humanos, Igualdad Racial e Inclusión Social, se comprometieron a poner fin a la homofobia y lograr la igualdad de derechos de la comunidad LGTB, entre otras cosas, impulsando en el seno de la Organización de Estados Americanos (OEA), la creación del cargo de Relator Especial que ayude a “promover el respeto por los derechos humanos de las personas lesbianas, gays, bisexuales y transexuales”.

El comunicado conjunto de los gobiernos de Estados Unidos y Brasil señala que los presidentes “subrayaron el compromiso común de promover y proteger los derechos humanos y apoyar la consolidación de la democracia en todo el mundo. De conformidad con la Carta Democrática Interamericana, reafirmaron que la democracia es esencial para el desarrollo político, económico y social. Reiteraron que los valores de la libertad, la igualdad y la justicia social son intrínsecos a la democracia, y que la promoción y protección de los derechos humanos es un requisito previo fundamental para la existencia de una sociedad democrática.” Los presidentes resolvieron “cooperar en la promoción de la democracia, los derechos humanos y la libertad para todas las personas a nivel bilateral como a través de las Naciones Unidas y otros foros multilaterales, (…) el fortalecimiento del Consejo de Derechos Humanos, (…) promover el respeto de los derechos humanos de lesbianas, gays, bisexuales y personas transgénero a través de la creación de un Relator Especial de la OEA. (…)”

En la Organización de Estados Americanos (OEA) A su vez, en la sesión extraordinaria celebrada por el Consejo Permanente de la OEA para conmemorar el Año Internacional de los Afrodescendientes, celebrada el 15 de marzo pasado, la presidencia del Grupo Encargado de Elaborar un proyecto de Convención Interamericana contra el Racismo y Toda Forma de Discriminación, que en la actualidad corresponde a Costa Rica, se comprometió a seguir avanzando en la elaboración del texto definitivo de dicho proyecto de Convención, en cumplimiento del mandato renovado año tras año en las Asambleas Generales de Santo Domingo en 2006; de Panamá en 2007; de Medellín en 2008; de San Pedro Sula en 2009 y en la de Lima de 2010. La Convención introduciría en el sistema interamericano de derechos humanos, “como categorías protegidas la orientación sexual y la identidad de género” y como explicamos en NG, crea derechos especiales y privilegios para las llamadas minorías sexuales, que darían pie a un verdadero totalitarismo gay. El 22 de marzo, la Casa Blanca dio otro comunicado que dice: “El presidente Obama cree que la promoción de los derechos humanos de las minorías y los marginados es un valor fundamental de los Estados Unidos. El Presidente se complace en anunciar que durante su viaje a Brasil, él y la Presidente Rousseff acordaron promover el respeto de los derechos humanos de lesbianas, gays, bisexuales y personas transgénero a través de la creación de un relator especial sobre asuntos LGBT en la Organización de Estados Americanos. Este relator especial será el primero de su tipo en el sistema internacional de derechos humanos.” “En los últimos meses nuestros diplomáticos han mantenido un diálogo franco, por momentos difícil, con los gobiernos de todo el mundo, sobre los derechos humanos de las personas LGBT. Esta mañana, en las Naciones Unidas en el Consejo de Derechos Humanos, 85 países se unieron a Estados Unidos para reafirmar nuestro compromiso conjunto para poner fin a los actos de violencia y abusos de derechos humanos sobre la base de la orientación sexual e identidad de género. El Presidente se enorgullece del trabajo que hemos realizado para construir un consenso internacional sobre esta cuestión fundamental y se compromete a continuar nuestros esfuerzos decididos para promover los derechos humanos de todas las personas, independientemente de su orientación sexual o identidad de género.”

Declaración contra la Discriminación por orientación sexual e identidad de género Recordemos que el 22 de marzo, fue presentada en el XVI período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, la Declaración contra la Discriminación por Orientación Sexual e Identidad de Género, en el marco del Seguimiento y la aplicación de la Declaración de Viena y el Programa de Acción, aprobado por la Conferencia Mundial de Derechos Humanos, en 1993.

La reinterpretación de Ban Ki-moon Esta Declaración refuerza las pretensiones del homosexualismo político para instalar en el lenguaje del sistema internacional de derechos humanos las categorías de “orientación sexual” e “identidad de género”, que no encuentran un reconocimiento o una definición clara y acordada en el derecho internacional. Las pretensiones del lobby gay se vieron fortalecidas por la reinterpretación de la Declaración Universal de Derechos Humanos que hizo el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, afirmando que la “orientación sexual” y la “identidad de género” están implícitamente contenidas en esa Declaración Universal, (Sesión Especial del Consejo, 25-01-11).

Al mismo tiempo la Declaración, como denunció el representante de la Santa Sede, alienta la persecución hacia quienes no aceptan el estilo de vida homosexual, y abre el camino para aplicarles los procedimientos internacionales que sancionan a quienes violan los derechos humanos. Como hemos ejemplificado en otras oportunidades, enseñar, predicar o trasmitir la doctrina de la Sagrada Escritura o del Catecismo de la Iglesia Católica sobre la homosexualidad, podrá ser considerado un acto de homofobia, punible por las leyes nacionales o internacionales. La Declaración tiene como antecedentes otras anteriores, una del Consejo de Derechos Humanos sobre este tema de 2006, que contó con la adhesión de 54 países, y otra de la Asamblea General de la ONU de 2008, que fue apoyada por 65 estados. (Los países representados en la ONU son 192, y de ellos 57 son miembros del Consejo de Derechos Humanos). Entre los estados que no firmaron la declaración se cuentan: Azerbaiján, Bielorrusia, China, Kenia, Moldavia, Federación Rusa, Perú y la Santa Sede; Turquía, Nigeria y los otros miembros de la Conferencia Islámica.

Perú defendió su ordenamiento jurídico Perú fue el único país hispanoamericano que no adhirió a la declaración. El 18 de marzo, los representantes del Ministerio de Relaciones Exteriores de Perú, Franca Deza y Gonzalo Guillén, declararon que si bien Perú está en contra de todo tipo de violencia y de violaciones de los derechos humanos, de adherirse a la declaración presentada en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, hubieran reafirmado la declaración del 2008 que Perú no firmó, en la cual se reconoce a la orientación sexual como parte de los derechos y libertades de las personas, con lo que su país se estaría comprometiendo al reconocimiento y protección de la unión o matrimonio entre personas del mismo sexo, entre otras situaciones incompatibles con la Constitución peruana.

En USA En el ámbito interno de los Estados Unidos, recordemos que el presidente Obama anunció, en febrero pasado, que su gobierno había renunciado a defender ante los tribunales federales la Ley de Defensa del Matrimonio (Defense of Marriage Act, DOMA), cuya constitucionalidad es cuestionada judicialmente por grupos pro gay. Cabe recordar que en situaciones de normalidad institucional, el Poder Ejecutivo representando al Estado, debe defender la legislación federal puesta en entredicho ante los tribunales. NOTICIAS GLOBALES, 26 y 28-3-11