EMPRESA AUSTRALIANA UTILIZA
EMBRIONES HUMANOS CONGELADOS PARA HACER JOYERÍA.
La “cosificación” del ser
humano llevada a límites intolerables.
Por Carlos Alvarez Cozzi
Las
agencias digitales de noticias dan cuenta que “una empresa australiana ha provocado
controversia por usar embriones humanos como parte de las piezas de joyería que
fabrica para sus clientes.” (http://conapfam.pe/2017/05/09/una-empresa-convierte-embriones-humanos-congelados-en-anillos-pulseras-y-pendientes/)
Allí
se da cuenta que una mujer que, tras someterse a varios procesos de fecundación
in vitro (FIV) y concebir tres hijos, contrató los servicios de Baby Bee
Hummingbirds para cremar
y convertir en joyería los restos de los embriones que no se implantaron
y quedaron congelados.
Baby Bee Hummingbirds es una empresa especializada
a elaborar joyería como “recuerdo”, con leche
materna, placenta, cabellos, cenizas o cordones umbilicales.
“Quería
tener más bebés, pero el costo emocional, además del financiero, era
demasiado”, dijo Belinda Stafford a Kidspot, y señaló que para ella y su
esposo, Shaun, donar sus embriones “no era una opción”.
“Escuché
que otros los habían
plantado en el jardín, pero nosotros nos mudamos mucho, así que
no podía hacer esto. Los
necesitaba conmigo”, dijo.
Para
Belinda, ahora que tiene a sus bebés dentro de joyería, “están para siempre
conmigo en un bello recuerdo”. Una
excusa realmente increíble.
Amy
McGlade, fundadora de Baby Bee Hummingbird, explicó a la web que su empresa
brinda “otra opción” a los padres de
los embriones humanos, y aseguró que su empresa es pionera en realizar estos
trabajos. Adviértase la catadura ética
de tamaña afirmación!
Demás está decir que esta
técnica tiene serios cuestionamientos bioéticos, pues implica acabar con una
vida humana en fase embrionaria para reducirla a un objeto decorativo.
En
declaraciones a ACI Prensa, Graciela Moya, Doctora en Biomedicina e
investigadora del Instituto de Bioética de la Universidad Católica Argentina (UCA), lamentó que “la deshumanización del ser humano
en etapa embrionaria sigue sorprendiéndonos”.
“Hoy
existiría la posibilidad de seguir haciendo un uso inhumano de los miles de
seres humanos congelados en etapa embrionaria”, dijo, y advirtió que “ya no
solo es posible seleccionarlos, descartarlos, congelarlos, donarlos para
investigación, sino que sería posible transformarlos
en un objeto decorativo, en una joya”.
“Los seres humanos congelados
en etapa embrionaria están vivos, solo se detiene su desarrollo en el tiempo. Los procesos
metabólicos que permiten su desarrollo se lentifican considerablemente para
mantenerlos en un estado quiescente, sin tiempo, sin futuro, una vida
dependiente de la decisión de sus padres de traerlos al presente”, señaló.
“Hoy
tenemos la posibilidad de no
considerar a nuestros hijos como un don que debemos cuidar y ayudar a
desarrollar sus virtudes, sino que pueden ser transformados en
un bien meramente material que adornen para siempre nuestras vidas”, criticó.
Como
hemos afirmado en otros comentarios nuestros de temas de Bioderecho,
(http://www.forumlibertas.com/personalismo-y-bioderecho/) la capacidad de asombro
parece no tener límites en esta área del conocimiento. Porque existen ya otros
casos de cosificación de la vida humana como los vientres de alquiler en la
llamada maternidad subrogada,
(http://www.forumlibertas.com/maternidad-subrogada-vientre-alquiler/) pero esto de usar embriones
humanos para hacer artículos de ornamento como son los de joyería, es el colmo
de la superficialidad utilitarista y asesina. Porque se están usando seres
humanos vivos como son los embriones, no como fin, que es toda vida humana,
sino como medio para un fin subalterno y deleznable.
Consideramos
que esta práctica constituye un crimen de lesa humanidad, que debería así ser
considerada, de acuerdo a los tratados internacionales de Derechos Humanos en
vigencia, y dichos delitos son imprescriptibles!
Porque
es persona todo individuo de la especie humana, y la Convención Americana de
Derechos Humanos en su art.4 ordena a los Estados a proteger la vida naciente
desde el momento de la concepción.
Por
ello se habla y con razón del estatuto jurídico del embrión. En el Uruguay, el
Código Civil en su art. 21 expresa textualmente que “Es persona todo individuo
de la especie humana”. Puede caber alguna duda que el embrión es un individuo
(genéticamente) de la especie humana? Porque no puede mudar en persona una cosa
sino que aquella lo es ontológicamente desde el inicio.
Lamentablemente
estas noticias quedan sólo en el interés de unos pocos cuando deberían ocupar
los titulares en la gran prensa. Esa misma que difunde muchas veces en forma
ostentosa noticias notoriamente menos graves e intolerables que la que nos
ocupa en este artículo.
Pero
claro, para que haya conciencia bioética debe primero existir conciencia,
distinguir el bien del mal, lo cual es objetivo y no subjetivo, como algunos
pretenden. Y este insumo previo, es el que está fallando notoriamente. De lo
contrario, estas situaciones no podrían producirse.