DON BOSCO

DON BOSCO
"BUENOS CRISTIANOS Y HONRADOS CIUDADANOS"

SEÑORES DIPUTADOS, EL EMBRIÓN ES UNO DE NOSOTROS



 Aurelio García Elorrio
Legislador Provincial

Luego de sancionada la Ley de Acceso a las Técnicas de Fecundación Artificial en nuestro país, más la sanción del nuevo Código Civil, era esperable que los diputados no dejaran pasar mucho más tiempo ni esperaran el fin de su mandato y, previo a los comicios de 2015, terminaran el camino de desprecio hacia la vida naciente. He aquí la muestra de ello.

Ahora legislan sobre las propias técnicas de reproducción humana y asistimos a una nueva victoria de los “lobbies mercantilistas” de la reproducción humana y de la manipulación genética, por encima del derecho a la vida de los niños no nacidos. No estamos en contra de que se legisle en la materia. Lo que rechazamos es que sea sólo para el interés de los “lobbies mercantilistas” que se dedican a ello, con desprecio absoluto de la vida humana en estado embrionario. Esto se pudo hacer bien respetando al embrión, su vida, su identidad. Pero parece más fácil hacerlo mal, realmente mal.

La República Argentina protege la vida desde la concepción, aunque el embrión no esté implantado. Así puede verse en la interpretación de las normas constitucionales que hiciera la Corte Suprema de Justicia en el caso “Portal de Belén”. A pesar de ello, el proyecto que se aprestan a votar casi todos los partidos políticos representados en el Congreso Nacional es una iniciativa absolutamente deshumanizante, en la que el embrión recibe un trato de “cosa”.


Parece que en este proyecto de ley la humanidad del embrión es una falsa promesa que sólo se hará verdadera cuando los profesionales médicos, como nuevos dioses de la técnica, consideren a los embriones como aptos y dignos de vivir, o cuando sea “apto o viable” para quienes lo pretenden como hijo, sólo si cumple con las condiciones que pusieron, o si tiene la suerte de ser implantado previo a la separación o divorcio de sus padres. Y si nadie lo quiere, será irremediablemente destruido o utilizado para la investigación.

La Voz del Interior, 28-10-14