Por Juan C. Sanahuja
En la mañana del
30-06-14, la Corte
Suprema decidió que la empresa Hobby Lobby no puede ser
obligada a pagar seguros para sus empleados que cubran contraceptivos y drogas
que potencialmente inducen el aborto. La decisión fue tomada por 5 votos contra
4.
La administración de
Obama estaba tratando de obligar a Hobby Lobby y a miles de empresas y
organizaciones cuyos dueños son pro-vida, a que cumplieran con el “mandato
contraceptivo”, que obliga a las empresas a pagar seguros para sus empleados
que incluyan anticonceptivos y drogas abortivas.
Dice la Corte que la Religious Freedom
Restoration Act de 1993 (RFRA) permite a las corporaciones como Hobby Lobby
mantener su perspectiva religiosa y a la vez hacer negocios. "Los términos
de la RFRA son
claros. El Congreso no discrimina contra los hombres y mujeres que desean
manejar su negocio con fines de lucro en la forma requerida por sus creencias
religiosas”.
El presidente del
Tribunal Supremo John Roberts y los jueces Samuel Alito, Antonin Scalia,
Clarence Thomas y Anthony Kennedy, votaron a favor de la libertad religiosa en
los casos Burwell v. Hobby Lobby Stores Inc. (antes Sebelius v. Hobby Lobby
Stores Inc.) y Conestoga Wood v. Burwell. Votaron por la minoría, contra la
libertad religiosa: Ruth Bader Ginsburg, Sonia Sotomayor, Stephen Breyer y
Elena Kagan.
La cadena Hobby
Lobby, con más de 500 sucursales en 41 estados, se enfrentó a una multa de 100
dólares por día por empleado o sea 1.3 millón de dólares en multas diarias por
violar el “mandato contraceptivo” (U.S. Department of Health and Human Services
-HHS- mandate in the Affordable Care Act).
La decisión sobre
Hobby Lobby sólo se aplica a las empresas, como Conestoga Wood Specialties, la
cual tenía en la Corte
Suprema un caso similar. Los grupos sin fines de lucro, como
Sacerdotes por la Vida ,
todavía están esperando una decisión sobre su derecho a optar por el mandato.
Las empresas, sean
con o sin fines de lucro, consideran que la ley sólo les da a elegir entre
elevadas multas o “ser cómplices de algo intrínsecamente malo”.