Por Mónica del Río
En la última sesión
de la Legislatura porteña la página gay blasfema SentidoG fue declarada de
“interés social”. El trámite parlamentario denota la ligereza con que se
trabaja en muchos ámbitos legislativos. El proyecto fue aprobado a mano alzada
junto a otros 23 despachos, cuya aprobación estaba prevista sin discusión.
En la misma sesión se
pidió pronto despacho para un proyecto de María José Lubertino (Exp. 1596-D-11)
que quiere que todas las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires tengan provisión
permanente de preservativos para los alumnos, a partir de los dos últimos años
del Nivel Primario (11 años). El expediente está en la Comisión de Educación
que preside Victoria Morales Gorleri (PRO).
Lubertino (FpV)
solicita que los preservativos estén “accesibles junto a un instructivo para su
adecuado uso” y que el Ministerio de Salud de la Ciudad -en coordinación con el
Ministerio de Educación- sea responsable de la provisión de preservativos en
las escuelas.
Destaca Lubertino en
los fundamentos de su proyecto que si bien los métodos anticonceptivos se
reparten gratuitamente en los Cesacs (Centros de Salud y Acción Comunitaria) y
Hospitales públicos, esos ámbitos suelen “estar alejados de las costumbres
cotidianas” de los alumnos.
Su iniciativa, según
afirma la diputada kirchnerista, responde “a la urgencia y necesidad de
promover políticas publicas tendientes a generar hábitos y prácticas
responsables”. Resulta cuando menos incoherente que intenten generar “hábitos
responsables” diciéndole a una niña de 11 años que necesita tener siempre a
mano preservativos -lo que da por descontado que es normal que a esa edad tenga
relaciones sexuales- y pidan el aborto cuando el anticonceptivo falla porque, a
esa edad, el hijo “trunca el proyecto de vida” y el embarazo “afecta la salud
mental”.
NOTIVIDA, Año XII, Nº
820, 28 de abril de 2012