DON BOSCO

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"BUENOS CRISTIANOS Y HONRADOS CIUDADANOS"

Francia rechazará la despenalización




 Sarkozy y Hollande contrarios a despenalizar el consumo de cannabis


 El presidente de Francia y candidato a la reelección, Nicolas Sarkozy, así como su máximo rival en los comicios, el socialista François Hollande, aseguraron hoy que no son partidarios de despenalizar el consumo de cannabis, actualmente tipificado como delito en el país.

El debate llega después de que François Robsamen, uno de los consejeros de Hollande y cuyo nombre suena como hipotético ministro del Interior, según el diario "Le Figaro", dijera recientemente en un mitin de campaña que es favorable a suprimir el consumo de cannabis del Código Penal para reemplazarlo por una multa.

En declaraciones a "Europe 1", Sarkozy señaló que "mientras haya familias afectadas por el aumento de la droga, enviar el mensaje del fin de la prohibición para el cannabis es irresponsable".

No obstante, en los comicios de 2007, el candidato conservador sí se mostró favorable a suavizar la legislación. Entonces, Sarkozy dijo que proponía multar el consumo y que los afectados pudieran encontrar ayuda y apoyo para dejar ese tipo de estupefaciente.

Hollande, por su parte, declaró hoy en la misma emisora de radio que "la proposición (de Robsamen) no es nueva" y recordó que el propio Sarkozy ya se había referido a ella en las últimas elecciones presidenciales.

"No la retomaré", apuntó a dos días de la primera vuelta de los comicios el socialista, quien agregó que no quiere "dar la mínima señal de que renuncia a la disuasión del consumo de cannabis", declaró Hollande.

En otras ocasiones, Hollande se había pronunciado a favor de un debate "a escala europea" sobre la cuestión que Robsamen, responsable de seguridad del Partido Socialista, apoya en que cada año la Justicia abre en Francia 142.000 procesos por consumo de cannabis de los que solo 24.000 terminan con sanciones.

A favor de un cambio en la legislación francesa, que en la actualidad contempla el consumo como un delito sancionable hasta con un año de cárcel y 3.750 euros de multa, se ha posicionado los partidos ecologistas y de izquierda.

El candidato del Frente de Izquierda, Jean-Luc Mélenchon, señaló en una entrevista el pasado enero que le parece "absurdo castigar a los consumidores porque es desproporcionado", aunque matizó que está a favor de que se siga persiguiendo a los productores.

También la ecologista Eva Joly apuesta por legalizar el cannabis para luchar contra la economía paralela que genera ese producto, aunque es partidaria de que se mantenga la prohibición sobre sustancias como la heroína o la cocaína.

La ultraderechista Marine Le Pen, por su parte, está en contra de la despenalización porque considera que es una política "profundamente peligrosa", mientras que el centrista François Bayrou ha tildado de fracaso la política antidrogas, pero no sin avanzar en qué la modificaría.

La propuesta de Robsamen no es nueva tampoco entre las filas socialistas. En junio del año pasado, un grupo de diputados de esa formación, liderados por el exministro del Interior Daniel Vaillant, se pronunciaron a favor de despenalizar el consumo y el tráfico de cannabis y aumentar los esfuerzos en la concienciación ciudadana sobre sus efectos.

"Lo paradójico es que Francia tiene una de las legislaciones más represivas de Europa, pero el nivel de consumidores es uno de los más altos, en particular entre los jóvenes de entre 15 y 24 años", afirmó entonces Vaillant, responsable de Interior entre 2000 y 2002.

20-4-12