PODRÍA LLEGAR A LOS
CELULARES DE NIÑOS Y ADOLESCENTES
NOTIVIDA, Año XVII, Nº 1060, 31 de agosto de 2017
Legisladores porteños presentaron un proyecto que
intenta modificar la Ley de “Educación Sexual Integral” (ESI) de la Ciudad de
Buenos Aires, para que los contenidos lleguen directamente a los teléfonos
celulares de niños y adolescentes.
El proyecto de ley (exp. 2330-D-2017) prevé el
desarrollo de una aplicación cuyo objetivo es descargar una "Guía para la
Educación Sexual Integral" (ESI) dirigida a padres, docentes y “alumnos de
todas las modalidades del sistema educativo público de gestión estatal y de
gestión privada”.
La autora de la iniciativa es la diputada María
Patricia Vischi y el proyecto fue cofirmado por Natalia Fidel y Hernán Rossi.
Los tres legisladores pertenecen al bloque de Suma+, que responde a Martín
Losteau.
El proyecto
El expediente describe los 15 puntos que deberá
contener la Guía de ESI. Por ejemplo:
Pto.4 (“Conocimiento y exploración del contexto”) se
prevé “propiciar aprendizajes basados en el respeto por la diversidad y el
rechazo por todas las formas de discriminación” (lo que equivale a la aceptación
de la conducta homosexual como algo normal y válido).
Pto.6. (“Respetar la diversidad”) “promover el derecho
al libre desarrollo personal, al trato digno, al goce de salud integral con el
fin de garantizar la identidad de género” (lo que implica, por ejemplo, tratar
al travesti como a una mujer).
Pto.7 (“Reconocer distintos modos de vida”) se afirma
que “generalmente, cuando hablamos de familia, nos representamos un modelo
único compuesto por la madre, el padre y uno o varios hijos o hijas. Este modelo
de familia responde a una representación de la realidad, pero no a todo el
abanico de situaciones histórica y socialmente posibles”.
La Guía de ESI plantea, además: la necesidad de que
haya “Talleres Interactivos”, basados en “imágenes, softwares educativos,
videos, etc”; la difusión de los “puntos de entrega de métodos
anticonceptivos”, la evacuación de “consultas on line con profesionales médicos
o especialistas en forma anónima y confidencial” y la publicación de un
“compendio bibliográfico” sobre ESI con “normativas vigentes que favorezcan la
identidad de género”.
Si bien el expediente no hace mención expresa al sitio
Chau Tabú, del Gobierno porteño, pide que “se direccione la búsqueda, desde la
Guía, hacia los sitios web o links del Gobierno de la Ciudad que permitan
promocionar, ver o descargar contenidos referidos a Educación Sexual Integral”.
Más allá de los cuestionamientos que merecen los
contenidos previstos para la Guía sobre ESI, cabe preguntarse finalmente cómo
se puede limitar el acceso de niños y adolescentes a la información pertinente
a una edad y grupo escolar superior, cuando la vía de acceso es el celular. No
se puede evitar que un celular sea utilizado por un hermano, amigo o compañero
de colegio de menor edad, o que la información sea compartida.