Julio Llorente, 3 Agosto, 2017
Infovaticana
Tal y como nos ha revelado Wikileaks, una de las
organizaciones más implicadas en el objetivo de flexibilizar el aborto en
Irlanda es la ‘Open Society Foundation’ de George Soros.
En Irlanda, la vida del no nacido está protegida por
la Constitución gracias a una enmienda aprobada en el año 1983; una enmienda en
la que se recoge que el nasciturus, su derecho a vivir, debe ser protegido,
respetado y defendido del mismo modo que es protegido, respetado y defendido el
derecho a la vida de la madre. De este modo, la legislación irlandesa es muy
restrictiva con el aborto: sólo está permitido en caso de que exista riesgo
para la vida de la progenitora.
Esta protección de la vida del nonato disgusta a
ingentes instituciones supranacionales, organizaciones y oenegés que han hecho
de la promoción de los dogmas progresistas su principal ocupación. No en vano,
han sido notables las presiones que la Unión Europea y la ONU han ejercido
sobre Irlanda para que ésta modifique su política provida.
En cualquier caso, tal y como nos ha revelado
Wikileaks, una de las organizaciones más implicadas en el objetivo de
flexibilizar el aborto en Irlanda es la ‘Open Society Foundation’ de George
Soros. Para conocer esta realidad, nos basta con leer su plan estratégico para
el período 2016-2019. Y es que, en él, se recoge el propósito de ‘contener,
mitigar y revertir la tendencia de las leyes que conciben al feto como persona
y de la enmienda constitucional’ y de generar ‘una robusta serie de
organizaciones que defiendan los derechos sexuales y reproductivos’.
En este plan estratégico, destapado por Wikileaks, la
organización de Soros prevé, además, que su acción en Irlanda se contagie a
otros países católicos con leyes de aborto restrictivas: ‘Con una de las leyes
de aborto más restrictivas, una victoria allí podría tener impacto en otros
países europeos firmemente católicos, como Polonia, y probar que el cambio es
posible, incluso en los lugares más conservadores’.
De acuerdo con los documentos filtrados, la ‘Open
Fundation Society’ ha financiado diversas asociaciones abortistas irlandesas,
entre las que cabe mencionar a la ‘Amnesty International Ireland’ (137.000
euros), a la ‘Irish Family Planning Association’ (132.000 euros) – que es una
filial de Planned Parenthood en el país – y a la ‘Abortion Rights Campaign’
(25.000 euros). El objetivo de estas donaciones sería, tal y como la propia
fundación de Soros reconoce, ‘trabajar conjuntamente en una campaña para
repeler la enmienda constitucional irlandesa que garantiza igualdad de derechos
para el feto que para la madre’.
El referéndum de 2018
Las presiones orquestadas por George Soros sobre
Irlanda parecen haber dado su fruto, pues en 2018 los irlandeses votarán en
plebiscito si la octava enmienda debe mantenerse o si, por el contrario, debe
cambiar de naturaleza. Así lo decidió este año el Gobierno de Leo Varadkar, un
homosexual declarado de ideas liberales que, en 2015, hizo campaña a favor de
la aprobación del ‘matrimonio’ gay en el país.
Las actividades de ‘Open Society Foundation’
Además de extender por todo el mundo los preceptos de
la ideología de género, el principal propósito de la ‘Open Society Foundation’
es eliminar los Estados-Nación y construir, de esta manera, un mundo sin
fronteras. Es por ello por lo que Soros – y su fundación – han estado
vinculados al impulso de movimientos migratorios masivos, entre los que podemos
destacar la llamada ‘crisis de refugiados’, y la creación de ingentes
instituciones transnacionales.
Ya en 1998, el magnate de origen húngaro aseguraba que
la ‘soberanía de los Estados debe estar supeditada a la ley e instituciones
internacionales’ y añadía que ‘el mundo requiere un sistema global de toma de
decisiones políticas. En definitiva, una sociedad global que pueda sostener una
economía global’.