nunca más usará pollera
Informador Público, 30-1-2013
Un oficial de la Prefectura Argentina
fue reconocido como varón trans incluso antes de tener su DNI actualizado con
el género autopercibido, lo que significa una demostración de que el cambio
cultural avanza más allá de las leyes, en momentos en que el tema de la
diversidad sexual está en debate en todo el mundo.
El de Diego (el
oficial que por el momento prefiere reservar su identidad) es un caso
emblemático porque es el primero de Prefectura Argentina y Gendarmería Nacional
a quien se le reconoce su identidad de varón
trans.
“Estoy muy contento
porque ya no tengo que mentirle a nadie, y lo que es más importante: ya no tengo
que negarme a mí mismo”, afirmó Diego, que hoy recibió su primer uniforme de
gala masculino.
El dato del uniforme,
que parece un detalle superfluo, es la muestra efectiva del reconocimiento de
la identidad autopercibida, explica el oficial.
Desde ahora, el uso
de la pollera -que formaba parte del uniforme de gala obligado para Diego para
cada ceremonia o acto protocolar- será parte de su pasado.
Cuando fue sancionada
la Ley de
Identidad de Género, el joven de 29 años sintió que podía empezar a pedir lo
que le correspondía: “mi verdadera identidad, algo de lo que tengo certeza hace
mucho tiempo y que no podía ejercer”.
Por eso, además del
reconocimiento de su identidad a nivel profesional, inició un tratamiento
hormonal que le ayudará a configurar su identidad de varón.
Diego agradeció la
labor del Centro Integral de Género, que por resolución ministerial asesora
además en otros temas como maltrato o acoso laboral, ya que ante su planteo le
respondieran “que no hacía falta
esperar a tener el nuevo DNI para poder cambiar el nombre en los registros y
legajo pertenecientes a la fuerza”.
Además, “vinieron al
edificio a dar una charla al personal. Estoy agradecido a ellos y a los
integrantes de ATTTA, organización que trabaja en defensa de los derechos del
colectivo trans”, destacó.
“Los chicos de ATTTA
fueron un pilar importante en la toma de mis útltimas y complejas decisiones”,
redondeó.
Sancionada el 9 de
mayo de 2012, dos años después de la
Ley de Matrimonio Igualitario, la Ley 26743 (de Identidad de
Género) es “la mejor del mundo porque rescata la identidad de la persona, su
verdad, su libertad”, reivindicó César Cigliutti, titular de la Comunidad Homosexual
Argentina (CHA).
La norma obliga al
Estado a garantizar el acceso a la documentación y a los tratamientos y
cirugías de readecuación en hospitales, obras sociales y prepagas. Pero su
mayor mérito fue haber abierto la puerta para que, detrás del derecho a la
identidad, se hagan efectivos todos los demás derechos en materia de salud,
trabajo, educación y vivienda.
Desde la sanción de
la norma, “unas 1700 personas trans en todo el país (aproximadamente el 80% de
mujeres trans y el 20% de varones trans) obtuvieron su DNI con los datos de
acuerdo a la identidad autopercibida, lo que demandó una gran coordinación
entre el Ministerio del Interior y el Registro Nacional de las Personas”,
precisó Esteban Paulón, titular de la Federación Argentina
de Lesbianas Gays Trans y Bisexuales (FALGTB).
Unos 40 países en
todo el mundo tienen una ley de estas características, bastante más que los
estados que aprobaron el matrimonio de personas del mismo sexo, otro avance que
hoy se debate en el parlamento de Francia.
Holanda, España,
Bélgica, Canadá, Sudáfrica, Noruega, Suecia, Portugal, Islandia, Argentina y
Dinamarca son los once países que tiene ley de matrimonio igualitario.
Además también es
legal en ciertas partes de Estados Unidos y en algunos otros territorios como
la capital de México, el estado mexicano de Quintana Roo; o el pequeño estado
brasileño de Alagaos.
Mientras que una
docena de naciones permiten a las parejas homosexuales adoptar niños en
igualdad de condiciones: Holanda, Sudáfrica, Suecia, España, Andorra, Bélgica,
Islandia, Noruega, Israel, Dinamarca, Argentina y Brasil.
“Tanto la identidad
de género como el matrimonio para las parejas de igual sexo son causas que van
de la mano en el mundo, porque avanzan a hacer plenos los derechos humanos de
todos”, dijo Paulón, quien señaló que “a poco de que los países tienen su ley
de matrimonio igualitario comienzan a discutir la identidad de género”.
“La igualdad debe ser
global o no será igualdad plena, y ésto es cuestión de tiempo”, concluyó.
(Diario Veloz)