catolicos-on-line, 20-5-16
El legislativo del estado de Oklahoma ha aprobado un
proyecto de ley que haría de la práctica del aborto un delito grave y revocaría
la licencia para practicar medicina de cualquier médico que participara en esa
práctica.
Esta medida, cuyos detractores han calificado como
anticonstitucional y sin precedentes, queda ahora en manos de la gobernadora
republicana Mary Fallin, quien contara con cinco días de plazo para decidir
firmar o no el proyecto de ley; su despacho no ha respondido a preguntas acerca
de cual es su intención.
Este proyecto de ley es el primero de su tipo según el
Center for Reproductive Rights, y afirma que otros estados que buscan prohibir
el aborto simplemente han hecho eso precisamente y no han incluido sanciones
cómo en este caso.
Según esta medida, conocida como Ley del Senado 1552,
cualquier persona que practique o induzca un aborto será culpable de un delito grave
punible por entre uno y tres años de reclusión en una penal estatal.
La legislación estipula así mismo que a cualquier
médico que practique un aborto —lo cual el texto califica como «conducta
contraria a la ética profesional»— le «será prohibido obtener o renovar una
licencia para practicar medicina en el estado». Sin embargo, la licencia para
practicar no será despojada de médicos que lleven a cabo un aborto que se
considere necesario para salvar la vida de una madre.
El proyecto de ley superó la cámara baja con 59 votos
a favor y 9 en contra el mes pasado; ayer fue aprobado por el senado 33 votos a
favor y 12 en contra.
«Creo firmemente que la vida se inicia en el momento
de la concepción y que esta debe ser protegida, estoy también convencido de que
es una función esencial del gobierno defenderla desde ese mismo momento»,
comento a la Associated Press el senador estatal republicano Nathan Dahm, quien
representa al condado de Tulsa.
Dahm dijo que tiene esperanzas de que esta medida por
parte de Oklahoma redundará en la derogación de Roe vs. Wade, el fallo de del
Tribunal Supremo de los EE.UU de 1973 que reconoció el derecho de la mujer al
aborto.
«Esta es una prohibición del aborto, ni más ni menos»,
afirmó Dawn Laguens, vicepresidenta ejecutiva de la Federación Planned
Parenhood de los Estados Unidos, en una declaración después de que la
legislatura aprobó el proyecto de ley «Castigar a los médicos por practicar un
procedimiento médico legal es un ataque a la mujer».
La asociación médica del estado, que ha calificado la
medida como «preocupante», dijo que no adoptaría ninguna postura en relación
con la legalidad del aborto. Sin embargo, el grupo ha dicho que se «opondría a
legislación diseñada para intimidar a los galenos o a suplantar su criterio
médico».
Cuando la ley se debatió en la cámara baja un
legislador, que ultimadamente votó en contra, citó este pasaje y señaló que la
medida podría obligar a los médicos abandonar un estado que ya se encuentra
falto de los mismos. Un proponente de la ley aseguró que la medida no tendría
ningún impacto.
Desde que accedió al cargo de gobernadora, Mary Fallin
ha aprobado más de una docena de proyectos de ley provida.
El proyecto de ley «es abiertamente
anticonstitucional, si llegara a ser aprobada será la ley más extrema en contra
del aborto en este país» desde el fallo Roe v. Wade, dice Amanda Allen,
consejera jurídica principal del Center for Reproductive Rights, en una que
escribió a Fallin el jueves.