En los próximos 20
años la mitad de los trabajos que realizan los humanos serán efectuados por máquinas,
afirma un estudio de la
Universidad de Oxford, Reino Unido, que fue publicado por la
prestigiosa revista The Economist.
Los autores de la
investigación concluyeron que la inteligencia de las máquinas y los robot
portátiles, a mediano plazo, habrán automatizado 702 ocupaciones. En el
análisis, dividen a las profesiones en dos grandes categorías: las que tienen
riesgo de desaparecer por su alto grado de mecanización y aquellas que tienen
una baja probabilidad de ser computarizadas.
Los puestos de trabajo
con mayores posibilidades de prescribir son los relacionados con el transporte,
la producción, instalación y mantenimiento, la agricultura, la venta al público
(como por ejemplo, cajero de supermercado) o funciones rutinarias como el cobro
de peaje.
En la primera etapa,
dice el estudio, las máquinas empezarán por sustituir a los humanos en campos
vulnerables como producción, administración, logística, marketing y servicios.
Lo que los autores dejan en claro es que no van a desaparecer completamente sino
que el trabajo cambiará y se necesitarán menos seres humanos en el proceso.
El abaratamiento en
los sensores hará que pronto se mecanicen muchas de las tareas de logística y
transporte. El fenómeno del BigData —donde electrodomésticos y autos estarán conectados
a internet— apunta a provocar una revolución social que permitirá automatizar
empleos que no son rutinarios y que requieren habilidades cognitivas.
Cálculo. Para
alcanzar este número de 702 tipos de labores, los investigadores aplicaron el
proceso gaussiano que se usa en finanzas para predecir resultados a futuro. Se
trata de un concepto matemático que genera muestras que evolucionan con el
tiempo.
La tesis de los
autores Carl Benedikt Frey y Michael Osborne, se apoya en los presagios que
desde hace casi un siglo vienen advirtiendo los escritores de ciencia ficción.
La evolución tecnológica que hoy está al servicio del hombre comenzará a
expandir sus fronteras y de a poco irá reemplazando las tareas que en la
actualidad cumple el 47 por ciento de la población activa.
Por tanto, afirman,
si la maquinaria los sustituye en estas funciones, los trabajadores,
inevitablemente, perderán su empleo. Esta tendencia afectará tanto a los países
en vías de desarrollo como a los industrializados.
La segunda etapa de
la transformación laboral que predicen los investigadores, será posible gracias
a los grandes avances en inteligencia artificial que ya abandonó la fase
experimental para convertirse en una realidad cotidiana, como los asistentes
digitales que están en todos los teléfonos inteligentes.
Cuando alcance su
esplendor, podrían dejar de ser necesarios algunos especialistas en áreas de
ciencia, ingeniería y arte.
El estudio dice que
un robot podrá operar un cuerpo humano con mayor precisión que un cirujano;
redactar textos legales, ofrecer orientación psiquiátrica y como ya ocurre en
Japón, cuidar a personas mayores.
Sin ir más lejos, IBM
puso a disposición del público la supercomputadora Watson para que a través de
Internet se le pueda realizar todo tipo de consultas en forma gratuita. Esto
implica todo lo relacionado con análisis de datos, predicciones estadísticas y
planificación de negocios, lo que Watson puede cumplir sin costos y en menos
tiempo que cualquier profesional calificado.
Erik Brynjolfsson y
Andrew McAfee, dos investigadores del MIT (Masachusets, Estados Unidos) indican
en su libro "La segunda era de las máquinas" que este proceso de
descomposición se inició en los años 80, con el auge de la computadora. El
núcleo más afectado fue el de los empleados bancarios, operadores telefónicos,
modistas, carteros, bibliotecarios y aceleró un 11 por ciento entre 2001 y 2010
la pérdida de profesiones.