– 3 DE MAYO - TURNO MAÑANA
NOTIVIDA, Año XVIII, Nº 1092, 3 de mayo de 2018
Durante la reunión, la diputada Brenda Austin le pidió
al presidente de la Comisión de Legislación General, Daniel Lipovetzky, que se
cumpla con los plazos previstos en el cronograma inicial. El diputado macrista
le respondió que esa es la preocupación de los presidentes de las cuatro
comisiones que concurren en el plenario y que -si fuera necesario para
dictaminar a fines de mayo- podrían llamar a más expositores por fecha, agregar
un día a la semana, o suprimir el break.
La diputada Ivana Bianchi indagó sobre la fecha del
recinto y Lipovetzky estimó que, al término de las exposiciones, necesitan una
semana –dos reuniones- para el debate entre diputados. Ambos coincidieron en
que “es un tema para sesión especial”.
La diputada Martínez mencionó al 13 de junio como
fecha tentativa y su par Araceli Ferreyra pidió que el 31 de mayo sea la “fecha
tope” para las audiencias, aunque tengan que “trabajar el sábado”. Solicitó que
al recinto se lleve en la semana siguiente al 10 de junio por más que no sea en
la fecha citada.
A continuación, la síntesis de las exposiciones.
Morena Arin (Médica generalista, “Red de profesionales
por el derecho a decidir”): Narró que cuando tenía 18 años acompañó a una amiga
a abortar y que esa experiencia marcó su profesión. Como médica acompañó en su
proceso de aborto a muchas mujeres. Entre
los casos descriptos, mencionó uno en el que la gestante “por error oyó los
latidos” de su hijo y desistió.
Alejandro Bulacio (Abogado, Mag en Cs. Políticas):
Explicó por qué el embrión es persona y parte de la comunidad política. Considera que sobre su cuerpo “el individuo
es soberano”. “La elección de la mujer es antes de la procreación”. “La despenalización por razones sociales es
una capitulación del estado”. “Los no nacidos no tiene más voz en el debate que
la de los propios legisladores”.
Carolina Balderrama (Periodista RedPAR): Habló, entre
otras cosas, como militante feminista y bisexual. Disertó sobre el papel de la
mujer en los medios. “Sólo el 15% de las notas son firmadas por mujeres”.
Aseveró que las periodistas feministas lograron que se escriban de otro modo
los temas policiales.
Maria Elena Critto (Socióloga): Evocó los datos
oficiales de mortalidad materna y destacó que hay causales con mayor
incidencia: causas obstétricas directas (hemorragias, sepsis). Pidió “trabajar
sobre todas las causas”. Mencionó los ejemplos de Chile y Uruguay que redujeron
la mortalidad materna antes de legalizar.
Alicia Benítez (Médica pediatra): Trabajó 40 años en
la Maternidad Sardá, y allí conoció las situaciones extremas. Afirmó que estuvo
con madres que murieron por abortos clandestinos y pidió la legalización de la
práctica. Aseguró que “el aborto inseguro es la primera causa de muertes
materna”. “El aborto legal, seguro y gratuito es garantía de equidad”.
Andrea Dos Santos (Hogar de Niños "El Buen
Samaritano): Refirió su vida personal -dijo ser “hija de bastarda”- y la lucha
de sus padres por acoger a niños abandonados, junto a los que se crio. Habló de
los latinoamericanos mestizos. Dio el ejemplo de Cuba, un país que no crece
poblacionalmente y que toma al aborto como un método de regulación de la
menstruación. Pidió que se facilite la adopción.
Candelaria Botto (Economía Feminista): En Argentina,
expuso, “se realiza casi un aborto por minuto. “Cada 5’ nace un bebé de una
adolescente”. “La maternidad penaliza a las mujeres en el mercado laboral”. “La
pobreza en Argentina tiene rostro de mujer” y un aborto cuesta “entre 1.000 y
1.500 dólares”. Pidió producción estatal de misoprostol. Contra las evidencias
alegó que “hay 3030 mueres por aborto clandestino desde el regreso de la democracia”.
Viviana Duarte de Massot (Psiquiatra): Habló con
solvencia de las consecuencias negativas del aborto, esas que afectan a las
mujeres, a su entono y a los agentes que intervienen. “Los síntomas del aborto
son identificables por todo el personal calificado” y “los más comunes son la
ansiedad y el desasosiego”. Hay trastornos emocionales y afectivos,
alteraciones conductuales y problemas de relación, explicó. Afirmó que “el
cerebro de la mujer registra el embarazo, desde el primer momento, más allá de que
sea deseado o no”. Remató pidiendo “legislar a conciencia con los datos de la
ciencia”.
Estrella Perramón
(médica imputada por la muerte de Keila Jones): Recordó que “en Chubut
tienen formación de profesionales, distribución de misoprostol, y Ley
provincial de aborto” y se quejó de que a pesar de todo fue juzgada por la
muerte de Keila Jones. “El aborto no puede ser un acto heroico que sólo hagan
algunos médicos”. Necesitamos “un marco legal”.
Gabriel Flores (Director de Bioética en la Federación
Pentecostal): “Como médico soy provida”. “La vida comienza con la concepción y
el aborto es terminar con una persona”, “la embriología lo marca claramente”,
refrendó. “Si la Argentina es una nación con valores profundos ¿quién nos impuso
esta discusión?” a lo que agregó: “Es una agenda impuesta por grupos poderosos
del poder económico que quieren despoblar el país y quedarse con nuestros
recursos”.
Ana María Franchi (Centro de Estudios Farmacológicos y
Botánicos): Habló del número de abortos voluntarios en el mundo y aseguró que
el “aborto legal y accesible” baja la mortalidad materna. Reiteró que “las
principales víctimas son las mujeres pobres”. Describió el ejemplo de Rumania.
Manifestó que “la despenalización no aumenta el número de abortos” y
curiosamente dio el ejemplo de Uruguay.
Doris Lozada (Ginecóloga, San Luis): Dijo que desde
hace 20 años hace ecografías prenatales y mostró imágenes del niño en
desarrollo. “Los médicos no podemos negar la evidencia”. “Hay tres actores principales
en la trama social que hoy nos trajo hasta acá: las mujeres (con sus múltiples
problemáticas), los médicos (garantes de la vida), el ser humano en gestación”.
Los médicos frente a la embarazada “vemos dos pacientes” y seguimos paso a
paso, junto a la madre, el desarrollo del feto.
Alejandra Iriarte (Abogada feminista, Tucumán): “No
sólo abortan las mujeres heterosexuales, también las lesbianas y la trans”,
dijo, y a partir de ahí habló de los “cuerpos gestantes”, “que se intentan
disciplinar”. “Lo que dramatiza al aborto es el estigma”. “Penalizar un
procedimiento médico es una práctica discriminatoria”.
Ignacio Ezequiel Alterini (Abogado, UA): “El plexo
normativo vigente protege a la persona desde la concepción”. Mencionó los
tratados internacionales y recalcó que “la jerarquía constitucional la alcanzan
en las condiciones de su vigencia”. “Se es niño desde la concepción” (ley
23.849). “De sancionarse las iniciativas no superarían los test de
constitucionalidad”.
Claudia Castro (Activista de “La Fulana” y la FALGBT):
Se refirió a las “personas con capacidad de gestar” y mencionó al aborto como
“una cuestión de clase social”. Destacó el logro del “matrimonio igualitario”
que militó. Sostuvo que “las mujeres que hablan a favor del aborto son sobrevivientes
de una historia que terminó bien”. “En los abortos clandestinos te abusan y
violan en medio de la anestesia”. “Muchas lesbianas sufren violaciones
correctivas en su entorno”.
Marcelo Riera (ex Ministro de Salud de San Luis):
“Estar a favor de las dos vidas no es sólo una expresión”. “¿Cuál es la
planificación sanitaria a largo plazo? ¿qué enfermedades resignaremos para
atender otras?”. “El aborto en nuestro país no es el principal problema
sanitario”, destacó, y advirtió que es importante tenerlo presente a la hora de
asignar recursos económicos y humanos.
Paula Forteza (diputada de En Marche, el partido que
lidera Macron): “Ninguna mujer concurre con alegría al aborto, siempre es un
drama”, expresó reiterando las palabras de Simone Veil, impulsora de la primera
ley de aborto en Francia (1975). Habló de los incentivos que hoy se dan en
Francia para tener un tercer hijo y coligió que pueden convivir “políticas
profamilia y probaorto”. Dijo que en Francia se prohibió el Cytotec con el que
hacían los abortos, pero van a permitir el uso del misoprostol en dosis más
reducidas.
Cecilia Otero (Médica): Repasó las muchas cosas que
sobre el inicio de la vida han quedado claras a lo largo del debate. También
mencionó como puntos aclarados categóricamente el marco jurídico y el síndrome
post aborto. Resaltó el dialogo
bioquímico que se da entre la madre y el hijo, que es “una interacción que
comienza en el momento de la concepción”. Contó una experiencia familiar: la mamá
se despertaba gritando todas las noches mientras soñaba que nadaba, finalmente
descubrió que su abuela había tratado de abortarla, entonces explicó que ese es
el “síndrome del sobreviviente”.
Sandra Hoyos (“Campaña por el derecho al aborto”):
Elogió las ponencias pro aborto y denostó a los expositores provida. Hizo un
remanido discurso sobre el “deseo de gestar” y los “mandatos culturales” y
habló de las movilizaciones del movimiento feminista.
Mario Turzi (Defensoría de la Vida Humana): Dijo que
el marco jurídico –que en Argentina protege el derecho a la vida- reconoce lo
que la ciencia demuestra. Recordó la
esclavitud y la explotación comercial de seres humanos. Acentuó que son
principios supremacistas y eliminacioncistas. Destacó que los médicos argentinos,
en general, no quieren ser cómplices en la violación de los derechos de la
persona por nacer. “No puede haber personas disponibles y personas que puedan
disponer de ellas”.
Diego Watkins (Activista Trans de ATTTA): Nació mujer
y a los 17 años comenzó a cambiar su aspecto, aunque “conserva su útero y
vagina”. Afirmó que “se invisibiliza la capacidad reproductiva de los hombres
que pueden quedar embarazados y quieren abortar”. “Los pibes trans también
morimos por aborto clandestino”. “Aborto legal para todos, todas y todes”.
Fernando Secin (Urólogo): Habló de estadísticas sobre
mortalidad materna. Destacó que el aborto no es la primera causa de muerte
materna, según reconoció el propio Ministerio de Salud. Comparó las
complicaciones por aborto con el número de camas disponibles. Resaltó las
carencias en los hospitales públicos: médicos desbordados, guardia inseguras y
falta de sangre, entre otras.
Jimena Néspolo (Escritora feminista): Recibió una
“educación cristiana que deconstruyó”. Sin mayores precisiones aseguró que
miles de mujeres mueren en abortos clandestinos. Hizo un discurso ideologizado
con el que intentó desnudar “alianzas patriarcales”.