Por Héctor GIULIANO
(27.9.2013).
Esta deuda no es un
hecho aislado, no es un episodio – no es algo que ocurrió una vez pero que
ahora ha devenido cosa del Pasado - sino que es un Sistema vigente y presente;
y que como sistema tiene una lógica que lo rige: la lógica del Sistema de la Deuda es la Usura , entendida como la
trampa de deuda perpetua por la cual el deudor nunca deja de ser deudor.
Ello se instrumenta a
través del peso de una deuda impagable que, una vez instalada, queda forzada
inexorablemente a ser refinanciada en forma permanente porque el país no puede
amortizar capital y entonces renueva continuamente las obligaciones que le caen
a su vencimiento y además toma deuda nueva.
Esta problemática de la Deuda puede ser sintetizada
en una decena de puntos en los cuales se compendia la cuestión de fondo del
endeudamiento y sus implicancias para la Argentina.
1. EL STOCK DE LA DEUDA.
Según cifras
oficiales del Ministerio de Economía (MECON) – última información disponible al
31.12.2012 – el stock de la
Deuda Pública era a esa fecha de 209.000 MD (Millones de
Dólares, expresados siempre con redondeo): 197.500 MD de deuda performing o en
cumplimiento (por la que se pagan los servicios) y 11.500 MD en manos de
bonistas que no entraron en el Megacanje Kirchner-Lavagna de 2005-2010 (los
holdouts).
2. LA DEUDA NO REGISTRADA.
3. LA DEUDA PÚBLICA
NACIONAL.
La deuda citada en
los dos puntos anteriores se refiere sólo a la que está en cabeza del Estado
Central pero para llegar a lo que sería la Deuda Pública total
de la Argentina
hay que sumarle más datos, que en su gran mayoría no se conocen porque no son
informados por las autoridades.
En efecto, falta
agregar aquí la Deuda
consolidada de Provincias (un saldo neto de 20.000 MD) y Municipios (sin
datos), la deuda del Banco Central (BCRA, por Lebac/Nobac: equivalente hoy a
unos 22.500 MD), la deuda de Empresas del Estado, Organismos Nacionales y
Fondos Fiduciarios (de las que no hay datos) y la deuda por juicios contra el
Estado con sentencia en firme (de la que directamente no se tiene idea).
No hay forma de
estimar la magnitud de la
Deuda Nacional porque las autoridades no informan los datos
pertinentes.
4. DEUDA INTERNA Y
DEUDA EXTERNA.
Normalmente existe
una confusión entre Deuda Pública y Deuda Externa:
- La Deuda Pública – los
209.000 MD del Estado Central (sobre los que hay datos oficiales del MECON) –
puede ser Interna (137.300 MD) o Externa (71.700 MD) según el criterio de
Residencia del Acreedor (radicado en el país o afuera).
- La Deuda Externa , en
cambio, es la suma de la
Deuda Externa Pública (los 71.700 MD citados) y la Deuda Externa
Privada (de Empresas y Bancos), que a fin del 2012 era de 68.500 MD. En total:
140.200 MD.
Las obligaciones de la Deuda Privada
obviamente no están a cargo del Gobierno pero las divisas que se necesitan para
girar los pagos de servicios al exterior las debe proveer el BCRA (divisas que
en este momento no las tiene) y además el gobierno es responsable por la
variación del tipo de cambio que se produjera (sobre todo en caso de fuerte devaluación)
ya que afectaría el cumplimiento de dicha deuda.
5. VENCIMIENTOS DE
CAPITAL.
La deuda por Capital
no se paga o cancela en forma neta sino que se refinancia en su totalidad: por
renovaciones automáticas – si las hubiera – o por novación de deudas, con el
mismo o con distinto acreedor.
Esta segunda variante
es muy importante en el caso argentino porque en los últimos años – bajo la
administración Kirchner – se pagan los vencimientos de la deuda con Acreedores
Privados y también Organismos Financieros Internacionales (FMI, Banco Mundial,
BID y CAF) con fondos que provienen de agencias del propio Estado (Deuda
intra-Sector Público).
6. AUMENTO DE LA DEUDA.
Así la deuda aumentó
14.600 MD en 2011 y 18.800 MD en 2012 – según datos del MECON – y para el 2014
según Presupuesto está previsto que aumente otros 12.700 MD.
Por ende, no es
cierto que la Argentina
se esté des-endeudando.
7. PAGO DE INTERESES.
A diferencia de los
vencimientos de Capital, que no se pagan sino que se refinancian íntegramente,
los servicios de Intereses sí se pagan y al contado – lo mismo que los cupones
anuales PBI – porque forman parte del Gasto Público Corriente.
Este año (2013) está
previsto el pago de intereses por 10.800 MD y en 2014 suben a 12.200 MD; y para
2015 pasarían a más de 18.000 MD.
Esto es, que los
pagos de intereses, como los vencimientos de capital, son fuertemente
crecientes en los años venideros.
El importe de 12.200
MD de intereses anuales a pagar en 2014 significa un promedio de 33.4 MD por
día: 1.4 MD por hora que pasa de nuestra vida.
8. EVOLUCIÓN RECIENTE
DE LA DEUDA.
El stock de la Deuda Pública era de
145.000 MD al momento del default, a fines de 2001.
Este saldo aumentó a
unos 175.000 MD después de la salida de la Convertibilidad ,
fundamentalmente por emisión de nueva deuda para cubrir la pesificación
asimétrica derivada de la macro-devaluación del peso, por entrega de bonos con
destino a saldar las diferencias de Bancos y Ahorristas (31.000 MD). Y tal es
el saldo que hereda la administración Kirchner en 2003.
El Megacanje
Kirchner-Lavagna de 2005-2010, con el que la Argentina retomó el pago
de bonos suspendido desde el default, no supuso en realidad quita alguna sobre
el stock de la Deuda
porque la reducción del 43 % fue compensada con la entrega de cupones PBI por
valor de 48 %.
La administración
Kirchner asume así un saldo de deuda del orden de los 175.000 MD, paga durante
el decenio 2003-2012 algo más de 173.000 MD – según lo informado recientemente
por la presidenta Cristina Fernández – y debe hoy más que antes: 209.000 MD.
9. LA DEUDA INTRA-ESTADO .
La peculiaridad que
la deuda no haya descendido pese a los elevadísimos pagos efectuados se debe a
que esas sumas erogadas – salvo por intereses y parte de los cupones PBI – se
pagaron en realidad con nuevas deudas y consecuentemente no bajaron el stock de
la deuda total.
La gran mayoría de
estos pagos, sin embargo, se hizo con Deuda intra-Estado, es decir, que se pagó
a Acreedores Privados y Organismos Financieros Internacionales (FMI, BIRF-Banco
Mundial, BID y CAF) con dinero tomado a préstamo de diversas agencias del
propio Estado, fundamentalmente ANSES (que administra la plata de los jubilados),
Banco Central (BCRA, por el uso de reservas internacionales para el pago de
Deuda Externa) y Banco Nación (BNA, de su cartera de créditos); así como toda
una serie de deudas menores con otros organismos oficiales (AFIP, FFRE,
Lotería, PAMI, etc.).
Hoy casi el 60 % (el
58) de la deuda pública performing (los 197.500 MD) está en manos de entes
públicos, o sea, que es Deuda intra-Estado.
Esta Deuda
intra-Estado ayuda al gobierno a paliar la nueva crisis de Deuda que está
sobrellevando pero presenta el problema que no tiene capacidad de repago.
0. ILEGITIMIDAD DE LA DEUDA.
El fallo Ballestero
fue remitido al Congreso pero el parlamento argentino nunca quiso tratarlo y en
cambio – merced a las mayorías legislativas de turno – le siguió delegando al
Ejecutivo todas las facultades extraordinarias necesarias para que el mismo
manejara unilateralmente el problema hasta la actualidad.
Cabe agregar que la
refinanciación y/o toma sistemática de deuda pública que no tiene capacidad de
repago demostrada por parte del Estado – cosa que se produjo y se sigue
produciendo – es también una causal de ilegitimidad y conllevaría graves cargos
por incumplimiento de deberes u obligaciones de los funcionarios públicos
superiores intervinientes en estas operaciones.
Hasta aquí la
síntesis de los puntos más graves que identifican o caracterizan la naturaleza
y gravedad de la situación argentina en materia de deuda pública.
Se trata de un
conjunto de problemas concurrentes dentro del problema financiero insoluble de
un sistema de deuda perpetua que condiciona no sólo las finanzas públicas y la
política económica general sino también la gobernabilidad misma del país.