NUEVA YORK, 16 de
agosto (C-FAM)
Un creciente apremio
envuelve la agenda de desarrollo de la ONU a medida que se acercan importantes
acontecimientos y caducarán metas a largo plazo. Interesa especialmente a
algunos el destino de la salud y los derechos sexuales y reproductivos. De
hecho, muchos gobiernos están manifestando cada vez más su irritación con los
defensores del aborto. En los últimos minutos de una conferencia celebrada
recientemente, los delegados se quejaron de que los derechos humanos estaban
siendo reducidos a derechos sexuales y reproductivos.
«[T]odo se dirigió de
antemano hacia la expresión "salud y derechos sexuales y
reproductivos"», criticó un participante en representación de su país,
«que no es ni siquiera un término» en el acuerdo de El Cairo «y no obstante se
lo da por sentado».
La conferencia de
tres días celebrada en los Países Bajos en julio pretendía introducirse en el
proceso de actualización de la agenda de desarrollo que se forjó en la
Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo de El Cairo
(CIPD), en 1994. Muchos de los oradores representaban a activistas que no
consiguieron que los países aceptaran un derecho internacional al aborto en la
CIPD.
Varios delegados se
quejaron de que la conferencia «CIPD más allá del 2014: Conferencia
Internacional de Derechos Humanos» prometía abordar cuestiones amplias, sin
embargo, se centró en temas «limitados».
«Desafortunadamente,
los temas clave circunscriben los derechos humanos y la CIPD a la salud sexual
y reproductiva y a los derechos reproductivos», dijo un participante.
Otro llamó al debate
«claramente, una desviación de la CIPD».
A la vez que
promovieron el aborto con entusiasmo, muchos oradores manifestaron frustración
por no poder impulsar el derecho al aborto en documentos de la ONU. Nafis
Sadik, ex directora del Fondo de Población, se refirió a la CIPD como «postura
mínima de consenso» en aborto y dijo que se habían hecho «pocos avances» para
promoverlo desde entonces. En una actividad patrocinada por Planned Parenthood
en la ONU, en mayo, la dra. Sadik acusó a sus aliados de timidez y de «alejarse
de nuestras propias metas».
La dra. Ana Cristina
González Vélez, activista colombiana proaborto, instó a los asistentes a
recurrir a los comités de la ONU que supervisan tratados de derechos humanos
para interpretar el derecho al aborto ausente en los propios tratados. «Esta es
la manera de avanzar», afirmó.
La dra. Marleen
Temmerman no fue optimista respecto de la posibilidad de una meta autónoma de
salud y derechos sexuales y reproductivos en la agenda de desarrollo post 2014.
La directora de Salud Reproductiva e Investigaciones Conexas de la Organización
Mundial de la Salud (OMS) pidió con insistencia a los allí presentes que
«piensen cuidadosamente y también políticamente» sobre cuál sería «la mejor
meta general en la que podamos insertar nuestro programa de derechos humanos».
La dra. Temmerman
asimismo compartió cómo, a comienzos de su carrera en Bélgica, ella y algunos
de sus compañeros ginecólogos decidieron realizar abortos violando abiertamente
la ley con el respaldo de la administración del hospital en el que trabajaban.
El parlamento belga, a la larga, legalizó el aborto por estrecho margen.
En los últimos
tiempos, la dra. Temmerman pasó de desacatar las normas a establecerlas. El año
pasado, el departamento de la OMS que preside publicó una guía de aborto
técnico política que incluye argumentos por los que los gobiernos no deberían
restringir legalmente la práctica.
Pese al abrumador
sentir proabortista manifestado en los paneles de la conferencia, un
colaborador hizo hincapié en el bienestar del no nacido. El presidente de la
Comisión Kasaja de Derechos Humanos figuraba en un vídeo de promoción de la
conferencia entre otros líderes. «Nos centramos en la salud reproductiva»,
decía Kuanysh Sultanov. «Priorizamos la salud de nuestros niños, no desde el
momento en que nacen, sino desde el momento en el que fueron concebidos».
En sus comentarios
finales, la presidente aseguró a los participantes que las opiniones en contra
se harían constar en el informe de la conferencia.