Los abogados de parejas gay habían propuesto que se le permitiera a Kim Davis, secretaria municipal del condado Rowan, quedar en libertad si prometía no interferir con la expedición de licencias por parte de sus subordinados, pero ella se negó.
Cinco de los seis subsecretarios municipales le dijeron al juez federal de distrito David Bunning que emitirían las licencias, aunque algunos de ellos indicaron que lo hacían con renuencia.
El único subsecretario que se negó fue el hijo de Davis, Nathan. El juez dijo que él no enfrentará ninguna multa ni pena de cárcel, ya que los otros subordinados accedieron a emitir las licencias.