EL MATRIMONIO SERA DEFINIDO COMO LA UNION ENTRE UNA MUJER
Y UN VARON.
Por
Carlos Álvarez Cozzi
Las agencias
internacionales de noticias, y portales como forumlibertas.com, dieron cuenta
que el pasado jueves, 24 de septiembre, el Parlamento de Brasil ejecutó un
primer paso para que el
matrimonio sea definido como la unión entre un hombre y una mujer.
Al
final de una sesión muy agitada, el Comité Especial para discutir la situación
de la familia de la Cámara
de Representantes brasileña aprobó el texto principal de un proyecto de ley en
ese sentido.
El
comité dio luz verde al informe preliminar por 17 votos a favor y 5 en contra,
aunque quedan por aprobar cuatro puntos del texto final, que serán votados en
el Senado.
Una vez
que el texto sea aprobado por Senado, donde probablemente obtendrá el visto
bueno, se elimina cualquier posibilidad de considerar matrimonio a las
uniones homosexuales, hecho que ha sido celebrado por los diputados
impulsores del proyecto.
La nueva disposición
legal marcará los derechos de las familias y las líneas de actuación política
del Gobierno en áreas que afectan a la institución familiar como son la sanidad
y la educación.
En respuesta a los
cuestionamientos de algunos legisladores contrarios a la iniciativa, el
diputado Evandro Gussi (PV-SP) defendió el nuevo Estatuto de Familia con las
siguientes palabras: “Queremos que todos los gays tengan sus derechos
garantizados, pero la
Constitución dice que la
familia merece una protección especial, ya que es la base de la sociedad”.
Se pondrá fin, de esta
manera, a la pretensión de algunos sectores partidarios de elevar a las
relaciones homo afectivas a la categoría de “matrimonio”. Es la misma línea
seguida por otros países sudamericanos como Paraguay y Perú.
Nos alegramos que el Parlamento de la República Federativa
del Brasil haga respetar la
Constitución en primer lugar, porque es derecho positivo,
pero fundamentalmente porque defina legalmente lo que está en la naturaleza del
matrimonio desde los albores de la humanidad, esto es, que se trata de un
vínculo fundamente de la familia, constituido en forma estable, entre una mujer
y un varón, para formar una comunidad de amor abierta a la vida. Y en relación
a la cual, y a diferencia de otro tipo de relaciones, la sociedad y el Estado
tienen particular interés en promover, como por ejemplo lo establece el art.40 de
la Constitución
de la República
de Uruguay. Esto es discriminar a los homosexuales? Para nada.
Es no confundir relaciones que no deben
ser confundidas. Que se regulen relaciones diversas al matrimonio es una
potestad soberana de cada Estado, pero que con ese motivo se confundan
relaciones que son justamente diversas, como las uniones homosexuales, en
relación al matrimonio, es de estricta justicia. No deben ser tratadas en forma
igual situaciones y relaciones que son diferentes, porque con ellos se cometería
una gran injusticia. Bajo la bandera de la no discriminación en realidad
operan los grupos de presión del lobby LGTBI, que en realidad lo que les
interesa no es tanto que exista el mal llamado “matrimonio” entre personas del
mismo sexo sino lo que buscan, -y ello ha sido admitido por algunos de sus
miembros- es introducir en la legislación de los países la ideología de género,
expresión superlativa del relativismo aplicada a la familia humana. Y es
evidente que la familia es la familia, y por ello no debe ser un campo de
batalla ideológico. Por tanto, bien hacen los Estados que en sus Constituciones
Políticas y en sus legislaciones definen el matrimonio como lo que es,
reconociendo y no creando, una realidad humana preexistente.