NOTIVIDA, Año XXI,
Nº 1289, 30 de mayo de 2022
Un nuevo hito en
la revolución cultural contra natura. Ya cambiamos embarazada por “persona
gestante” y ahora vamos por las “personas menstruantes”. Los diputados
oficialistas impulsan proyectos para garantizarle (a “todes”) el acceso
gratuito a los productos de “gestión menstrual”. Se podría crear un
“Observatorio de la gestión menstrual”. La iniciativa se considera “un avance
en la agenda de género” que el feminismo quiere mantener activa.
El viernes pasado
se realizó en la Cámara de Diputados una jornada para impulsar los proyectos
vinculados a la “gestión menstrual”. Del plenario -organizado por la diputada
del Frente de Todos Jimena López- participaron funcionarias y activistas
feministas vinculadas a la temática.
Expusieron, entre
otros, Elizabeth Gómez Alcorta Ministro de las Mujeres, Micaela Ferraro del
Ministerio de Desarrollo Social, Marcela Vilar Ministro de Ambiente de la prov
de BsAs, las diputadas Mónica Macha y Silvana Ginocchio y la Directora
Ejecutiva de Amnistía Internacional Mariela Belski.
Gómez Alcorta dijo
que gestionar la menstruación para las mujeres y LGBTIQ+ ocasiona un gasto que
implica “desigualdad de género y de clase”. En la menstruación “hay una
connotación negativa asociada a estereotipos y tabúes que genera
discriminación”. Desde el Ministerio consideramos que hay que trabajar sobre 4
ejes: 1) eliminar el estigma, 2) sensibilizar a la población sobre la gestión
menstrual desde una perspectiva de género y diversidad, 3) vincular el tema a
la salud sexual y reproductiva y 4) garantizar la provisión de insumos.
Narró que desde su
cartera están haciendo un relevamiento de todos los Municipios del país que ya
tienen programas de gestión menstrual y los están fortaleciendo con
cuadernillos y recursos. “Una gestión menstrual acorde a las necesidades de
cada persona es un derecho”. “Somos uno de los pocos países de la región que
tiene este tema en agenda” y “es un orgullo que los movimientos de mujeres y de
diversidad sigan avanzando”.
Mónica Macha:
sugirió hacer un plenario de la Comisión de Mujeres y Diversidad -que preside-
junto a la de Salud, para darle pronto despacho.
Instó a debatir
fuertemente sobre los métodos anticonceptivos porque las pastillas alteran el
ciclo menstrual. “Nosotras terminamos siempre poniendo el cuerpo para tener una
sexualidad libre y lo hacemos a costa de nuestra salud, cuando hay métodos como
la vasectomía”. “Todo esto tiene que ver con tirar abajo el patriarcado”.
La diputada
catamarqueña Silvana Ginocchio manifestó que su proyecto reproduce uno aprobado
en su provincia que es más limitado que el de López porque sólo contempla la
gratuidad de los insumos para personas en situación de vulnerabilidad
económica. La diputada provincial Mónica Salazar autora del proyecto local,
explicó luego que en Catamarca hicieron previamente un trabajo territorial para
identificar a la población objetivo.
Micaela Ferraro
(Ministerio de Desarrollo Social), confesó que cuando llega a alguna provincia
le piden muchas cosas, pero a los financiamientos le impone “casi como
condición”, que una parte vaya destinada a comprar elementos de “gestión
menstrual”. “Esto lo podemos hacer porque hoy somos gobierno, pero si no lo
sellamos en una ley, siempre va a depender de que haya una compañera
feminista”.
Mariela Belski
destacó que “la salud menstrual es una cuestión de derechos humanos” y que la
falta de agua limpia y de sanitarios provoca desigualdad estructural para las
personas menstruantes. Pidió estudiar la posibilidad de quitar el IVA de los
productos de gestión menstrual.
Karim Gambirassi
Kalibah: “varón trans”, vicepresidente de la asociación “Trans Argentinxs”:
enfatizó que impulsan esta ley porque el término “persona menstruante” los
incluye. Pidió una pronta sanción ya que “reconocer la soberanía e identidad de
los cuerpos es reconocer y conquistar derechos”.
Mercedes
D’Alessandro, afirmó que la gestión menstrual insume unos $ 5.000 al año.
Describió su tarea en el Ministerio de Economía en el que fue hasta hace poco
la Directora de Igualdad y Género: “No podemos dejar que nos digan que es lo
importante en este momento para las mujeres y las personas trans que
menstrúan”. “Que sea ley y que la marea roja –menstruante- nos lleve a otro
logro feminista y nos haga conquistar otro derecho”.
Marcela Vilar
Ministro de Ambiente de la prov de BsAs: comenzó diciendo que hacen
“ambientalismo popular” y que desde esa perspectiva el principal problema
ambiental es la desigualdad y la pobreza. Después se refirió al impacto
ambiental de los productos de gestión menstrual descartables.
Algunos de los
expedientes. que tramitan en la cámara baja son:
Expte 1953/2022 de
la massista Jimena López, de creación de un Programa Nacional para garantizar
el acceso gratuito a productos de gestión menstrual reutilizables para todas
aquellas personas (“mujeres, trans, no binarias y otras identidades”) que
cursan ciclos menstruales . El proyecto fue cofirmado por sus compañeros del
FdT: Mara Brawer, Alicia Aparicio, Mònica Litza, Mònica Macha, Lía Caliva,
Paola Vessvessian, Anahí Costa, Ma. Rosa Martínez, Marcela Passo, Victoria
Tolosa Paz, Carolina Moisés, Nancy Sand, Carlos Selva, Liliana Paponet, Hilda
Aguirre, Leonardo Grosso y Silvana Ginocchio.
Expte. 1969/2022
presentado por Silvana Ginocchio (FdT), también prevé un Programa para asegurar
el acceso a gratuito a productos de gestión menstrual sustentable pero, en este caso, restringido a personas
con vulnerabilidad económica. Se crearía además el Observatorio de Gestión
Menstrual en la órbita del Ministerio de Economía. El proyecto fue acompañado
por sus compañeras de bloque: Anahí Costa, Ma. Rosa Martínez, Ma. Graciela
Parola, Nancy Sand y Brenda Vargas.
Expte. 1481/2022
que solicita que se exima del IVA a los productos de higiene menstrual. La
iniciativa es de la autoría de la joven diputada Brenda Vargas Matyi y fue
cofirmada por sus pares del Frente de Todos Liliana Yambrún y Tanya Bertoldi.
Expte. 143/2022
del salteño Lucas Godoy (FdT), garantizaría a “todas las personas menstruantes”
que cursen como estudiantes en establecimientos públicos o privados un (1) día
de “Inasistencia Justificada por Día Menstrual” por mes calendario.