habla de su calvario por explicar en las aulas
que solo hay dos sexos: masculino y femenino
Javier Navascués
Infocatólica,
31.01.23
Jesús Barrón.
Nacido en Bilbao en 1970. Licenciado en Ciencias Geológicas por la Universidad
del País Vasco. Ha sido docente durante casi 30 años en los niveles de BUP,
COU, ESO y Bachillerato en centros escolares privados, profesor en Educación de
Adultos, FP Superior y docente en Máster en la universidad.
Investigador,
productor y gerente de materiales químicos para la empresa privada. Gran amante
de la Naturaleza, escritor de guías deportivas y practicante habitual de
deportes de riesgo y aventura.
¿Cómo nació su
calvario por enseñar la verdad en las aulas?
Todo comenzó un 19
de abril de 2021 cuando entregué a los alumnos de 1º ESO del IES Complutense de
Alcalá de Henares (Madrid) unas fotocopias de la Unidad Didáctica que
corresponde al tema 9 de la Programación Curricular de 1º de ESO. Esa Unidad
Didáctica cumple la legislación del Real Decreto 1105/2014 de 22 de diciembre,
por el que se establece el currículo básico de la Educación Secundaria
Obligatoria y del Bachillerato, y que está publicada en el Boletín Oficial del
Estado, con fecha sábado 3 de enero de 2015. Dicha Unidad Didáctica es de una editorial
española, y en ella se desarrollan los contenidos, criterios de evaluación y
estándares de aprendizaje evaluables del temario de Biología y Geología para 1º
de ESO y 3º de ESO.
A los alumnos les
expliqué, desde el punto de vista científico y biológico, los conceptos de sexo
(XX para la mujer y XY para los hombres), el género (masculino y femenino, en
un proceso de desarrollo desde los dos años de edad hasta la adolescencia), el
concepto de transexuales como cambio de apariencia (a través de un proceso
hormonal u operaciones médicas) de un hombre y de una mujer, pero no de
transformación cromosómica, ya que no es posible para la Ciencia. Esto está
determinado por la Naturaleza en el momento de la unión del material genético
del óvulo (cromosoma X) con el espermatozoide (cromosoma X o Y).
Parece ser que un
alumno, supuestamente no binario, se sintió molesto o incómodo por estas
afirmaciones científicas y fue a mostrar una queja a la directora del IES. Esto
resultó aprovechado por ella para atacarme por ir en contra de las leyes de
género, al estar fuertemente ideologizada al respecto, y porque estaba en su
punto de mira desde hacía meses.
¿Por qué cree que
esa persecución se cebó especialmente en usted?
En este instituto
y a través del Departamento de Orientación se imparten talleres realizados por
agentes externos. Estas charlas están integradas dentro del horario escolar y
sin previo conocimiento de los padres. Dichos agentes son por ejemplo Amnistía
Internacional, Movimiento Contra la Intolerancia, el colectivo LGBTI, Cruz
Roja, etcétera.
El contenido de
estos talleres son un claro adoctrinamiento de los alumnos, y los títulos de
las sesiones muchas veces distan mucho de lo que comunican a los alumnos.
Esto lo denuncié
públicamente en las reuniones de tutores y entre mis compañeros docentes, que
prácticamente todos estaban en contra de estos talleres y la forma de como se
estaban impartiendo.
Mis comentarios
fueron trasladados por la jefa del Departamento de Orientación a la Junta
directiva, con un notable tinte social comunista. Desde entonces, y a título
personal principalmente de la directora y de la orientadora, fueron contra mí
ya que era contrario a su pensamiento ideológico.
Con motivo de la
unidad didáctica anteriormente citada yo dije en el aula verdades científicas
que van en contra de la ideología de género totalitaria e impositiva que
quieren implantar en nuestro sistema educativo y en las conciencias de los
alumnos. La Ciencia dice que hay dos sexos y dos géneros en contraposición de
las ideologías sin base científica que afirman que existen tres sexos, cinco
géneros y decenas de orientaciones sexuales, resultado de la imaginación,
apetencias, confusiones y apercibimiento subjetivo de la condición sexual de cada
persona.
¿Qué le dijeron al
ponerse en contacto con usted? ¿Le ofrecieron rectificar?
Con fecha 28 de
abril de 2021, me reuní en el despacho de dirección del instituto con la
directora y el jefe de estudios. Me informaron por escrito de que se había
recibido una queja de una familia en relación a unos comentarios que realicé en
el aula.
Pregunté por el
contenido de los comentarios, que la directora conocía, pero no me quiso
revelar en ese momento. Me interesé, entonces, por la familia y el alumno, y se
negó también a darme sus nombres. Me ofrecí para hablar con ellos y pedirles
disculpas si podía haberlos disgustado en algo, aunque evidentemente, yo en ese
momento no podía sospechar que afirmar una verdad científicamente demostrada, y
respaldada por los libros de texto que los docentes utilizamos, hubiera podido
molestar a alguien. Su negativa, sobre este ofrecimiento mío, también fue
tajante.
La tutora del
alumno tampoco quiso intervenir en este asunto, y no reveló su nombre para que
yo pudiera tener una conversación con él y con sus padres.
En los centros
escolares, todos los días hay quejas de los alumnos y profesores ante Jefatura
de Estudios y Dirección. Prácticamente todas se solucionan con una
amonestación, una conversación o una falta leve. En este caso, me consta que la
directora no quiso resolverlo en el despacho, sino que fomentó que la familia
denunciara los hechos, e hizo mucho hincapié en este asunto para poder iniciar
un expediente sancionador.
¿Quién está
realmente detrás de esta atroz persecución?
Creo que desde
principios de curso fui incómodo para algunas personas de la dirección del
centro escolar y otros departamentos del IES Complutense, solo por el hecho de
pronunciarme sobre cursos y talleres que no eran apropiados para menores de
edad. Este hecho les ha mantenido en alerta hasta que han aprovechado las
clases de sexualidad y reproducción humana (recuerdo que fueron propuestas y
avaladas desde el Departamento de Orientación del IES Complutense) como excusa
para aplicarme de manera desproporcionada y poco educativa toda la carga de las
leyes de Género y otras. De este modo se ha pretendido dar una respuesta
aleccionadora, que ha perjudicado a todos los agentes implicados y que ha
generado un gran escándalo entre profesores, padres y alumnos.
¿Usted siempre
tuvo claro que no podía claudicar renunciando a decir la verdad?
He oído decir en
las juntas de tutores del instituto que la verdad es relativa y subjetiva. Con
estas premisas kantianas se establece un marco educativo basado en el
constructivismo y por lo tanto en formar una realidad en función de cómo siente
o percibe la persona. Esto se transmite a los niños y jóvenes, para así poder
enlazar todas las teorías de género, feministas y trans.
Pero existen
verdades absolutas, objetivas y científicas, contrastadas según el método
científico a través de la experimentación, y expuestas en leyes a la luz de la
razón. Aunque esos colectivos dictatoriales son obstinados, la naturaleza lo es
más que ellos.
Los seres humanos
hemos admirado, escuchado y escudriñado a la Naturaleza desde hace milenios,
hemos desvelado muchos de sus misterios y los hemos sintetizado y desarrollado
en ciencias que hemos sido capaces de proponer de forma razonada. Aunque la
razón parezca una mirada fría, no nos priva de la admiración: cada día asumimos
sin oposición que el sol sale por el Este (solo en los equinoccios), que la
Tierra es redonda, que formamos parte de un Sistema Solar con una estrella
central y 8 planetas orbitando, que la célula es la forma de vida más básica, y
también que genéticamente el hombre es XY y la mujer XX. Esto último hay quien
lo llama determinismo sexual o imposición de la Naturaleza, pero cambiarlo o
transformarlo solo se puede realizar volviendo a nacer.
Escuché hace años
en la universidad donde me licencié una conferencia de un famoso genetista
español que decía que “Dios perdona siempre, el hombre algunas veces y la
Naturaleza nunca…” y me recuerdan aquellas palabras a todas estas absurdas y
nada científicas leyes antes mencionadas con una marcada orientación
antinatura.
¿Por qué es
importante oponerse con firmeza a las imposiciones de la ideología de género?
En Educación,
parece ser que la contraprestación que obtiene el Estado por la enseñanza
gratuita es la del secuestro de las conciencias de los jóvenes, por cierto sin
permiso de sus propios padres, dentro del horario lectivo y con carácter
obligatorio, a través de modos de pensar impuestos de modo acrítico y que los
poderes públicos utilizan para desarrollar nuevas estructuras
afectivo-sexuales-políticas-ecológicas. Esta arma de manipulación masiva yo
personalmente la defino como adoctrinamiento ideológico.
Rebajar esas
imposiciones ideológicas, moderarlas y no digamos ya ir en contra de ellas
supone para quien haga tan abyectas acciones la marginación, el menosprecio
público o, en mi caso, un intento de suspensión de empleo y sueldo.
Ese marco
totalitario, inquisidor y fiscalizador, está amparado por las leyes del Nuevo
Orden Mundial que han establecido una dictadura de lo correcto, sin posibles
disidencias, compuesta por las leyes de género, los intereses del grupo
LGTBIQ+, el feminismo más radical y otros añadidos que forman parte de las
llamadas Bioideologías.
El resultado
particular de esa dictadura, en mi profesión en concreto, es silenciar a los
docentes que discrepan o que se limitan a pensar por sí mismos y hacen pensar a
sus alumnos, amenazándoles con injustas sanciones o apartándolos directamente
del sistema educativo, gracias a rigurosas medidas cautelares, impuestas
(supuestamente) por atentar contra la libertad de cátedra y de enseñanza.
¿Cuál ha sido el
precio que ha tenido que pagar y que perjuicio le está ocasionando en su vida?
El día 31 de mayo
de 2021 nos reunimos en el despacho de la directora del IES Complutense de
Alcalá de Henares la propia directora Ylenia Megías, una jefa de estudios,
Marta Marco y la secretaria, María Teresa Martí. Me hicieron entrega de un
sobre con mi nombre manuscrito. La notificación era la resolución de la
Dirección General de Recursos Humanos, por la cual se incoa un expediente
disciplinario a mi persona, Jesús Luis Barrón López. Esta propuesta viene
formulada por un Informe del Servicio de Inspección Educativa de la Dirección
de Área Territorial Madrid-Este (informe cuyas preguntas estaban previamente
pactadas entre la dirección del IES y la Inspectora, con cuestiones ciertas,
preguntas falsas y alusiones sacadas de contexto). El acuerdo tercero de dicha
resolución dice textualmente que “se acuerda la suspensión provisional de
funciones de don Jesús Luis Barrón López, durante el plazo máximo de seis
meses”.
Al día siguiente,
el 1 de junio de 2021, dejé de asistir al instituto, con la consecuente
privación de impartir docencia y de presentarme físicamente a mi puesto de
trabajo.
Con fecha del 15
de julio de 2021 se levantan las medidas cautelares de suspensión de empleo y
sueldo de la sanción (cumplo 45 días de sanción), pero el miércoles 11 de enero
de 2023 me notifica la Comunidad Autónoma de Madrid que dan por cerrado el
proceso sancionador administrativo y que desde el viernes 13 de enero ejecutan
la sanción y me suspenden de nuevo de empleo y sueldo durante 4,5 meses para
cubrir por completo la pena de 6 meses sancionado.
El dar por cerrado
el proceso sancionador administrativo, dicen desde la CAM, es porque presenté
fuera de plazo las alegaciones al recurso de alzada con plazo máximo de
presentación el 23 de marzo de 2023. Tengo los justificantes de haberlos
entregado dentro de plazo.
Recuerdo que 2
días antes de recibir la notificación electrónica de aviso de ejecución de la
sanción, la Jueza de Instrucción del Juzgado de Alcalá de Henares llamó a
declarar al Director de Recursos Humanos de la Consejería de Educación de la
Comunidad de Madrid (Miguel Zurita), por ver indicios de prevaricación en mi
proceso sancionador, respondiendo de este modo a la querella criminal por
prevaricación que interpusimos en contra de la directora del IES y de la
inspectora de la DAT-este.
¿Cómo agradece la
labor de Abogados Cristianos que le está ayudando a todos los niveles?
Abogados
Cristianos ha estado desde el principio acompañándome en esta injusticia y
atentado contra la verdad, la libertad de expresión y de cátedra en el aula.
Ellos conocen muy bien las leyes de la ideología de género y saben combatir con
eficacia este totalitarismo impositivo que están implantando en todos los
niveles de la sociedad (arte, medicina, enseñanza, etc.) Sus campañas están
orientadas para evitar caer en el miedo sancionador que genera silencio y
cancelación de las personas que vamos contra la idea de pensamiento único de
estas corrientes ideológicas.
¿Cuál es la ayuda
concreta que necesita y a donde se puede mandar?
Hace unos días que
Abogados Cristianos comenzó una campaña de recogida de donativos para ayudarme
económicamente y que finaliza el día 31 de enero de 2023. El enlace es el
siguiente:
https://abogadoscristianos.com/3ZOfR88
.
Me consta, por los
mensajes y emails que estoy continuamente recibiendo, que hay personas muy
buenas, con un corazón enorme, y que están apoyando esta campaña con gran
generosidad. Muchos de ellos me comunican que están rezando personalmente por
mi causa, con lo que tengo mucho que agradecerles a todos los niveles. En esto
se nota que los cristianos y las personas de bien estamos unidos frente a las
adversidades y por la libertad.