RECETARÀN MISOPROSTOL EN LOS CENTROS DE ATENCIÓN PRIMARIA?
NOTIVIDA, Año
XIX, Nº 1157, 25 de abril de 2019
Con 167 votos
positivos y uno negativo –el de la santafecina Lucila Lehmann- Diputados le dio
media sanción anoche a la Ley de Ejercicio de la Obstetricia. Una aprobación
express condicionada por los organismos financieros internacionales.
Las feministas
bregaron por esta ley desde 2008 y ahora -en su séptimo intento- de la mano del
Ejecutivo lograron que en sólo cuarenta y ocho horas se dictamine, baje al
recinto y se apruebe, con el voto incluso de muchos “celestes”. La
premura responde a las condiciones crediticias que el Banco Interamericano de
Desarrollo (BID) le impuso al Gobierno Nacional.
Recordemos que
el préstamo de 200 millones de dólares acordado con el BID en noviembre de 2018
exigía, entre otras “condiciones especiales previas a la iniciación del
desembolso”, “que el Ministerio de Salud de la Nación haya promovido la
presentación al Congreso de la Nación de un Proyecto de Ley que regule el
Ejercicio Profesional de la Obstetricia, facultando, entre otros, que estos
profesionales apliquen los métodos anticonceptivos previstos en el PENIA”.
El proyecto
“Tiene por
objeto establecer el marco general del ejercicio de la licenciatura en
obstetricia … a fin de contribuir a garantizar los derechos sexuales y
reproductivos de las personas y de la comunidad, desde un enfoque de derechos
humanos y perspectiva de género”.
“El ejercicio
profesional de la licenciatura en obstetricia comprende las funciones de
asistencia pre, durante y post eventos obstétricos con un enfoque
biopsicosocial”. Aunque a las complicaciones que de allí se deriven las van a
tener que seguir atendiendo los médicos.
“Dentro de un
marco de respeto de la autonomía de las personas”, se habilita a los
licenciados en obstetricia para realizar las siguientes actividades de
“asistencia pre, durante y post eventos obstétricos”:
· Brindar consejería y asistencia.
· Realizar acciones de promoción de los
derechos sexuales y los derechos reproductivos tanto en el ámbito de la salud
como en el ámbito educativo
· Ofrecer consejerías integrales en
salud sexual y reproductiva
· Asesorar y prescribir métodos
anticonceptivos, así como realizar intervenciones relacionadas con ellos,
incluyendo la colocación y extracción de métodos anticonceptivos de larga
duración
· Brindar asistencia en etapa
preconcepcional
· Realizar detección y asistencia precoz
de embarazo
· Prescribir y administrar fármacos,
según vademécum obstétrico en vigencia
Entre las
obligaciones de las personas graduadas en obstetricia está la de “respetar la
confidencialidad y el secreto profesional”. Y entre sus derechos el de “negarse
a realizar o colaborar en la ejecución de prácticas que entren en conflicto con
sus convicciones religiosas, morales o éticas, siempre que de ello no resulte
un daño inmediato o mediato para la persona, informándole previamente sus
derechos como paciente y efectuando la oportuna derivación para que acceda a
los mismos sin dilaciones”
Las firmas del
dictamen
PRO: Eduardo
Amadeo, Carmen Polledo, Cornelia Schmidt Liermann, Daniel Lipovetzky, Karina
Molina, Graciela Ocaña, Pedro Pretto, Jorge Enríquez, Samanta Acerenza y Sergio
Wisky.
UCR: Brenda
Austin, Horacio Goicoechea, Karina Banfi, Luis Petri, Claudia Najul, Mario
Arce, José Manuel Cano, Gonzalo del Cerro y Olga Rista
Coalición
Cívica: Alicia Terada
Frente para la
Victoria: Mónica Macha, Mirta Soraire, Laura Alonso, Adrián Grana, Roberto
Salvarezza y Carlos Castagneto,
FR: Cecilia
Moreau y Carla Pitiot,
Otros: Daniel
Arroyo (Red por Argentina), Pablo Yedlin (Justicalista), Ana Carla Carrizo
(Evolución Radical), Jorge Franco (Concordia Misonero) y Beatriz Ávila
(Justicia Social).
El debate en el
recinto
Carmen Polledo
(PRO, Ciudad de BsAs): Dijo que la participación de los licenciados en
obstetricia ayuda a reducir la mortalidad infantil y materna, y que esta ley
coopera con en el cumplimiento de la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030 de
Naciones Unidas. Le agradeció al secretario de Salud, Adolfo Rubinstein la
colaboración de la Secretaría que conduce en la elaboración del proyecto.
Eduardo Amadeo
(PRO, BsAs): Habló de desigualdad en las tasas provinciales de mortalidad
materna e infantil y vaticinó que ambas van a descender con esta ley. Ponderó
el Plan PENIA (Prevención del Embarazo No Intencional en la Adolescencia) para
el que “esta ley va a ser fundamental”. Mencionó a los métodos “modernos” de
anticoncepción que las obstetras van a ayudar a difundir.
Sergio Wisky
(PRO, Río Negro): Festejó la ley que “moderniza una ley de 1967” y que “está
orientada a uno de los pilares de la política sanitaria los planes
materno-infantiles”.
Claudia Najul
(UCR, Mza): Recordó a dos licenciados en obstetricia de Mendoza con los que
trabajó siendo ministra de salud provincial y afirmó que “con esta ley le dan a
los obstetras el rango que merecen”.
Mónica Macha
(FpV, Buenos Aires): “Actualizamos la ley para incorporar las acciones que ya
se venían llevando adelante en cuanto a prevención del embarazo no deseado y de
las enfermedades de transmisión sexual”. Destacó que el proyecto fue elaborado
con la participación del colectivo: “Nosotras parimos, nosotras decidimos”.
Afirmó que esto tiene que ver “con la agenda del feminismo y con las decisiones
de las mujeres sobre su cuerpo”. “En este contexto feminista estamos pariendo
una sociedad diferente”.
Jorge Franco
(Frente de la Concordia, Misiones): Resaltó que la humanidad se desarrolló con
la asistencia de parteras, “antes se las llamaba matronas”. Aseguró que la
asistencia del parto es institucional -en los países desarrollados- en el 90%
de los casos, pero hay lugares donde todavía atienden matronas.
Norma Abdala de
Matarazzo (Frente Cívico, Sgo. del Estero): Recorrió artículos del proyecto y
destacó que en Santiago existe la carrera de Licenciado en obstetricia en la
Universidad Nacional.
Romina del Pla
(FIT, BsAs): “Esta actividad involucra temas fundamentales, como la promoción
de los derechos sexuales y reproductivos y no se circunscribe al ámbito de la
salud”. Recordó el discurso de Abel Albino durante el debate de aborto y lo
tildó de “oscurantismo en primer nivel”. Reclamó la Ley de Educación Sexual
Integral. Anticipó que acuerdan con la ley en general, pero no con la
posibilidad de que los licenciados en obstetricia puedan hacer objeción de
conciencia.
Araceli Ferreyra
(Movimiento Evita, Ctes): Dijo que este proyecto está vinculado con “la
violencia obstétrica que se visibilizó durante el debate de aborto” y que está
relacionada con el “derecho a decidir de la mujer”. “Nosotras parimos, nosotras
decidimos”. Durante el debate en particular pidió que se elimine la posibilidad
de ser objetor de conciencia, en aras de la “separación Iglesia / Estado”.
Horacio
Goicoechea (UCR, Chaco): “La ley viene a jerarquizar a un sector de la salud”,
“la partera es la primera que asiste a la embarazada”. “En el país hay
niñas-madres y en 12 provincias están ejecutando el Plan ENIA y las obstetras
pueden ser las grandes aliadas de este Plan”.
Silvia
Lospennato (PRO, BsAs): “Es una ley con un sentido profundamente feminista”.
“Es una ley que se vine impulsando desde el año 2008”. “Esta ley pretende
mejorar los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres”. “El proyecto fue
elaborado con la colaboración de la Secretaría de Salud de la Nación y el Fondo
de Población de Naciones Unidas”.
Además del voto
negativo de Lehmann, hubo tres abstenciones las de Juan Brügge (Córdoba
Federal), Vanesa Massetani (Frente Renovador, Sta Fe) y Gisela Scaglia (PRO,
Sta Fe).